El Gobierno español está dando largas a los partidos en la negociación de los Presupuestos con la intención de dejar el acuerdo para el último minuto, y esta actitud está provocando las primeras situaciones de tensión y serias advertencias del PNV, su socio de investidura más fiable. Los jeltzales han avisado este lunes de que no descartan registrar una enmienda a la totalidad. Es la primera vez que lo verbalizan. Ha pasado más de un mes desde que iniciaron contactos, y todavía no se ha cerrado un acuerdo sobre el traspaso de la gestión del Ingreso Mínimo Vital a Lanbide, ni para garantizar el soterramiento del Tren de Alta Velocidad en su entrada a Bilbao y Gasteiz, con el agravante de que estas dos cuestiones forman parte de acuerdos que ya tendrían que haberse cumplido. Nada se ha movido.
El burukide Koldo Mediavilla avisó en Radio Euskadi de que “todos los escenarios están abiertos”, y fuentes del grupo vasco en el Congreso confirman que no hay nada que les mueva a no presentar esa enmienda a la totalidad. La decisión no está tomada. El plazo para registrarla termina el día 29, el viernes de la próxima semana, aunque habría margen para retirarla o confirmarla hasta que se voten el 4 de noviembre. Sánchez parece estar tranquilo porque PDeCAT y EH Bildu han renunciado a presentar esa enmienda y no darán ese paso, aunque al presidente español aún le faltan votos, y tanto el PNV como ERC están lanzando el mismo aviso porque no han alcanzado un acuerdo con Moncloa. Mediavilla fue muy categórico con el Tren de Alta Velocidad y advirtió de que el soterramiento debe quedar encarrilado de inmediato. En función del grado de cumplimiento de los compromisos para el día 29, el PNV tomará una decisión sobre la enmienda, aunque confía en cerrar un acuerdo y que la sangre no llegue al río.
El jeltzale aclaró que su grupo no ha cambiado de idea, y mantiene “un posicionamiento franco de colaboración” con el Gobierno de Sánchez porque es partidario de que haya Presupuestos y gobernabilidad. Además, el PNV no está ciego y también se tomó como un gesto la voluntad expresada por la vicepresidenta Ribera para modular el decreto sobre el precio de la luz y frenar su impacto en la industria vasca y los empleos. Sánchez también ha evitado un conflicto con los jeltzales al renunciar otra vez a elevar los impuestos al diésel. El PNV hace el análisis de que Sánchez quiere contar con sus seis votos aunque pudiera lograr apoyos por otras vías menos procelosas, porque el respaldo de los jeltzales lanza un importante mensaje al mundo empresarial y en clave de estabilidad. Pero los jeltzales exigen que su confianza se vea “correspondida” con el cumplimiento de estos acuerdos que ya traen cola. Solo así podrán asumir más compromisos en el futuro. De lo contrario, “va a ser muy complicado que el PNV esté por la labor”.
LAS DOS VÍAS DEL TAV
LAS DOS VÍAS DEL TAV
Mediavilla criticó que no haya avances sobre el TAV. Recordó que el plazo para registrar las enmiendas a la totalidad finaliza el día 29 y espera que, para entonces, “haya un compromiso claro”. Hay dos escenarios posibles con el tren: una encomienda de gestión para que Euskadi asuma las obras y descuente después la cuantía en el pago del Cupo, aunque el Gobierno español no parece aceptarlo y solo lo asumió en su momento para el tramo guipuzcoano; y, por otro lado, existe la posibilidad de que se firme ahora la licitación de la obra del soterramiento para que quede claro que la prioridad es esa y, si mientras tanto se ve que los plazos aprietan, se habilite una estación provisional. Pero el PNV no aceptará que se empiece la casa por el tejado, con una estación provisional.
Mediavilla admitió que puede haber un ámbito de “provisionalidad”, pero dejando claro que las estaciones finales son Bilbao y Gasteiz y soterradas. Lamentó que en Madrid primen las “negociaciones en el último minuto” y auguró “situaciones de tensión”, aunque espera que sea posible un acuerdo.
SIN NOVEDADES SOBRE EL IMV
El vicelehendakari primero y presidente de la Comisión de Transferencias, Josu Erkoreka, confirmó por su parte que el Gobierno vasco sigue “a la espera” de recibir la oferta sobre la transferencia del IMV que prometió la ministra Rodríguez para este mes. El traspaso tendría que haber llegado el 31 de octubre de 2020, pero Escrivá lo ha bloqueado y ahora se están sumando algunas presiones desde los funcionarios de la Seguridad Social, que esgrimen la sentencia del Tribunal Constitucional contra la gestión de la ayuda en Catalunya como un freno en general para todas las comunidades, aunque la CAV y Nafarroa tienen un régimen foral. En ETB1, apostó por la transferencia completa para cumplir el Estatuto, y planteó que, con respeto a la caja única, se pueda proponer que haya varios cajeros con las mismas normas y principios.
Por otro lado, Mediavilla avisó a Bildu y Podemos de que escribir un “tuit” sobre la luz es fácil, pero que el PNV defiende los empleos en la industria vasca. Además, criticó que estos grupos veten el debate de la exploración del gas cuando está en ciernes una crisis energética.