- La expresidenta del Parlament Carme Forcadell denunció ayer su situación tras serle revocado el tercer grado penitenciario: “No sé cuándo terminará este sufrimiento, porque la represión no para. El juez de vigilancia penitenciaria número 1 de Catalunya estimó el recurso de la Fiscalía y anuló el régimen de semilibertad que la Generalitat concedió en enero a Forcadell y a la exconsellera Dolors Bassa, que deberán pasar de nuevo todo el día en la cárcel. Ambas recordaron que ese mismo juez les concedió el tercer grado antes de cumplir una cuarta parte de la pena y por eso no entienden que ahora haya cambiado de postura: “Las condiciones no han cambiado”. “Esperábamos que el Tribunal Supremo nos revocase el tercer grado, pero no tiene sentido que lo haga el juez de vigilancia penitenciaria”, censuraron. Bassa reclamó además que no se especule con su libertad, en referencia a los indultos y la reforma del delito de sedición del Código Penal propuesto por el Gobierno español.
Por su parte, el candidato de ERC a la Presidencia de la Generalitat, Pere Aragonès, aseveró en un tuit que “revocar el tercer grado es vulnerar derechos y libertades”, y añadió: “Siempre la injusticia, siempre la venganza. No desfalleceremos, a vuestro lado, Dolors Bassa y Carme Forcadell”. También el expresident Carles Puigdemont se mostró “muy triste y también muy decepcionado por esta nueva injusticia”.
También la portavoz de En Comú Podem en el Congreso, Aina Vidal, calificó la decisión como “un horror”. “Ambas tendrían que estar en sus casas”, sentenció.