- Tan solo 48 horas después de las elecciones catalanas, la relación entre el Gobierno español y el partido independentista con más votos y escaños en esa cita con las urnas, ERC, se enfrenta a su primer órdago. Y es que ayer se debatió en el Congreso una moción de la formación republicana para que la Cámara baja inste al Ejecutivo del PSOE y Unidas Podemos a “negociar un referéndum de autodeterminación con el Govern como solución pactada y democrática al conflicto político”. El PSOE anunció que se opondrá a esta iniciativa en la votación de mañana, en lo que puede interpretarse como una primera piedra en el camino del diálogo con una Generalitat aún no constituida y que el candidato de ERC, Pere Aragonès, aspira a presidir. Sin embargo, el gabinete de Pedro Sánchez tendió al mismo tiempo la mano y reivindicó el diálogo con las instituciones catalanas para superar la “fractura de convivencia” en esta región.
La portavoz socialista, Adriana Lastra, explicó que “a nadie le tiene que sorprender la posición del PSOE en contra de esta moción” ya que “somos el partido del diálogo y así ha quedado refrendado por los catalanes, y en ese camino transitaremos en la mesa de diálogo cuando se forme el Gobierno catalán”. “No defendemos un referéndum de autodeterminación”, advirtió, ya que ERC quiere plantear en esa mesa de negociación entre Moncloa y la Generalitat el indulto a los políticos independentistas presos y dicho referéndum. En contraste, la portavoz del Ejecutivo español, María Jesús Montero, dijo confiar en que “el diálogo sea la base sobre la que se mantengan las relaciones” entre los dos gobiernos “para superar de una vez por todas la fractura social y de convivencia que existe en Catalunya”.
Por su parte, Unidas Podemos volvió a desmarcarse de su socio de gobierno y adelantó que se abstendrá en la votación, alegando que lleva el referéndum en su programa electoral. El presidente de su grupo parlamentario, Jaume Asens, abogó por convocar de forma “inmediata” la mesa de diálogo en cuanto se forme el nuevo Ejecutivo catalán para negociar en dicho foro la posibilidad de celebrar el referéndum. Criticó, eso sí, que ERC plantee este tema tan solo dos días después de las elecciones autonómicas. “No nos parece serio que se lleve hoy al Congreso esa moción cuando aún no hay Gobierno en Catalunya ni está convocada la mesa de diálogo”, dijo.
A favor de esta iniciativa -que solo ha recibido una enmienda de Vox- votarán el PNV, Más País, Compromís y el grupo proponente, ERC. Pese al sentido de su voto, la diputada de la CUP Mireia Vehí se preguntó por qué ERC pide este referéndum mediante una moción y no es más explícito en el marco de una investidura a president como la que aspira a protagonizar Pere Aragonès. El líder de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví, afirmó que “las soluciones democráticas son las que permiten a la gente expresarse” e incidió en que “si se ha podido celebrar un referéndum en Gran Bretaña sobre Escocia o en Canadá con Quebec, igual el problema se acaba cuando a la gente le permites expresar libremente su opinión”.
Esta moción deriva de la interpelación que el portavoz de los republicanos, Gabriel Rufián, dirigió durante la sesión de control del pasado 3 de febrero al ministro de Política Territorial y primer secretario del PSC, Miquel Iceta. ERC defenderá su iniciativa en plena resaca de las elecciones del domingo, en las que los partidos independentistas sumaron 74 escaños y rozaron el 51% de los votos y donde la formación que preside Oriol Junqueras conquistó la primera plaza de este bloque superando a Junts en un acta y 35.000 sufragios.
“No defendemos un referéndum, somos el partido del diálogo y ahí vamos a transitar”
Portavoz del PSOE en el Congreso