- La fiscal general del Estado, Dolores Delgado, reveló ayer la existencia de una tercera investigación relativa al rey emérito, Juan Carlos I, que se encuentra en estado “muy embrionario” y de la que se ocupará, al igual que las dos anteriores, la Fiscalía del Tribunal Supremo con la colaboración del fiscal jefe Anticorrupción Alejandro Luzón, presente durante el anuncio que se realizó durante un encuentro informal con periodistas .

Las pesquisas, de las que no se han concretado datos sobre si afectan tan solo al emérito o a más personas, aún deben ser incoadas formalmente y parten de una información procedente de “inteligencia financiera” -Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención de Blanqueo de Capitales (Sepblac)-. Se trataría de conductas realizadas en un espacio temporal aún por delimitar y que inicialmente podrían incardinarse en blanqueo de capitales de los que podrían derivar delitos fiscales. Todo dependiendo de si se cometieron cuando el monarca gozaba de inviolabilidad en su condición de jefe de Estado.

Esta tercera línea de investigación se une a las otras dos ya abiertas al rey emérito, la primera por posibles comisiones procedentes del AVE a la Meca y que previsiblemente será archivada con respecto al padre de Felipe VI por no encontrarse indicios que se puedan perseguir debido a la inviolabilidad.

La causa, no obstante, se seguirá investigando respecto de otras personas y por ello esta parte de las diligencias vuelven a la fiscalía Anticorrupción. En cuanto al informe relativo a Juan Carlos I, está previsto que se presente antes de que concluya el año, pues se trata de hechos que pueden ser diferenciados perfectamente de los atribuidos al resto de implicados.

El segundo expediente, que se encuentra ya “muy avanzado” en palabras de la fiscal general, es el relativo a pagos con una tarjeta de crédito de los que se podrían haber beneficiado Juan Carlos I y otros miembros de la Casa Real sin ser titulares de la cuenta asociada a este medio de pago, si bien de su contenido no hablaron ayer ni Delgado ni Luzón. En este asunto se incorpora el jefe de Anticorrupción al equipo ya constituido en el Supremo y presidido por Juan Ignacio Campos.

Esta segunda causa sí podría sobre el papel sentar al monarca emérito en el banquillo, ya que se trataría de pagos fraudulentos cometidos después de su abdicación en 2014.