El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha insistido en la necesidad de evaluar primero las últimas medidas adoptadas para frenar los contagios de covid-19 antes de establecer nuevas restricciones, algo sobre lo que ya podría tenerse "un análisis con muchos datos hacia el miércoles o el jueves". En todo caso, ha asegurado que se están analizando "todas las medidas posibles", aunque ha eludido pronunciarse sobre un nuevo confinamiento que, según advertido, "tendría una incidencia" en la economía y supondría "la necesidad de replantear el ejercicio presupuestario".

En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, el presidente vasco ha reiterado que las últimas restricciones aprobadas en el LABI el pasado lunes "tenían que tener una vigencia de quince días para analizar los resultados epidemiológicos", pese al crecimiento de los casos positivos.

Según ha indicado, se está realizando un análisis "a diario" de los datos para valorar si hay que adoptar otras medidas. En este sentido, ha asegurado que se está en "alerta permanentemente" ante la situación "inquietante y de máxima preocupación", que se intenta abordar desde "una situación de equilibrio" en la preservación de la salud y "con la mirada puesta en la economía y la actividad social".

Urkullu ha apuntado que "hacia el miércoles o el jueves" se estará "en disposición de hacer un análisis ya con muchos datos de estos primeros diez días" de aplicación de las medidas y, según ha explicado, se están analizando "todas las medidas posibles".

El lehendakari ha eludido pronunciarse sobre la posibilidad de un nuevo confinamiento, como están aplicando otros países. "Si ahora mismo me pronuncio en este sentido, va a sonar como una alarma y como que ya nos vamos a tener que confinar", ha apuntado.

Más medidas restrictivas

No obstante, ha indicado que, tras las restricciones del pasado lunes, "evidentemente" se están analizando otras medidas, entre las que ha citado "el cese de actividades económicas no esenciales a una hora determinada" o "la limitación a diario a una hora más adelantada", aunque ha recordado los límites en este sentido del decreto de estado de alarma.

Según ha indicado, es preciso "ser conscientes de los límites" con los que se juga "y pensar si nuevas medidas también tienen que ser adoptadas a nivel de conjunto de estado".

Urkullu indicado que, en el análisis que se está realizando, también se analizan medidas como las decretadas en otros países, de "mantener sólo la actividad educativa y laboral y el resto suspenderlo, pero ha advertido de que es preciso también "saber la consecuencia de todo ello".

"En ese análisis estamos permanentemente", ha asegurado el presidente vasco, que ha eludido "adelantar" medidas porque se trata de un proceso de análisis "diario, casi a minuto" con las autoridades sanitarias y "exige de colaboración con las administraciones que tienen sus competencias y provoca una necesidad de gobernanza colaborativa aquí en Euskadi, pero también con un planteamiento de medidas que quizá sea necesario adoptar a nivel de Estado español".

En esta línea, preguntado si tras el Consejo Interterritorial del miércoles podría ya acordarse algo, ha respondido que teme que "sí". "Todos debemos estar preparados para las opiniones que se emitan y, en su caso, las decisiones que se puedan plantear en el Consejo Interritorial o, incluso, las que nosotros podamos aportar", ha añadido.

Asimismo, ha aludido a la petición de la Comisión Técnica del LABI de dotar de mayor frecuencia en los transportes públicos para evitar aglomeraciones y ha precisado que no hay "datos de que se haya dado ningún caso más allá de lo que puede ser habitual" en este ámbito.

Urkullu ha indicado que se plantea que "quizá habría que incrementar las frecuencias" en el transporte público, pero ha recordado que las competencias están "distribuidas" entre distintas administraciones. Según ha indicado, es "un análisis volcado a intentar evitar el agrupamiento y si para ello, aun cuando no se hayan detectado casos significativos, tenemos que aumentar frecuencias las diversas administraciones lo tendremos que analizar".

ESFUERZO DE LAS ADMINISTRACIONES

Ante las voces que apuntan a la necesidad de tomar medidas con mayor antelación, ha subrayado que en Euskadi se han ido adoptando medidas "desde el mes de junio", de manera que los rastreadores han pasado de 30 a más de 400 personas, es "punta en gestión de camas UCI" y existe un "colchón", aunque se está "preparados para hacer frente a una situación más cruda todavía".

El lehendakari ha insistido en que no hay "colapso hospitalario" y ha subrayado "la fortaleza" del sistema sanitario vasco, que ha atendido en una semana 132.000 casos en Atención Primaria presencial y el doble en telemática, cada día hace entre 10.000 y 15.000 pruebas PCR y ha vacunado ya a 300.000 personas contra la gripe. "Tenemos un sistema sanitario fuerte y con capacidad de respuesta", ha asegurado.

En relación a las convocatorias de huelga en Osakidetza, convocadas para la semana pasada y ésta, ha señalado que las movilizaciones se dan no sólo en Euskadi "en demanda de mayores recursos en entornos mucho mayores que el propio que nos afecta a nosotros como comunidad autónoma".

"Yo las entiendo así, pero en comparación con lo que era hace un año, la plantilla de Osadetza este año ha crecido un 8,3% y hemos llegado a un total de 38.000 profesionales, algo que nunca había sucedido", ha destacado. En este sentido, ha explicado que el incremento de 3.500 profesionales más es equivalente al "total de la plantilla de un hospital comarcal como el de Galdakao", ha destacado.

De este modo, ha insistido en que se está "abordando toda la estructura de Osakidetza y los recursos materiales" y Euskadi está "mucho mejor preparada" que en la primera ola.

No obstante, ha asegurado que es "consciente de la presión" que están sufriendo los profesionales sanitarios. En todo caso, ha añadido que "también la administración está haciendo un esfuerzo" para dotar de más recursos humanos y materiales "y los presupuestos son finitos".

En este sentido, ha recordado que, al "esfuerzo" en Salud --que ha cifrado en 340 millones más de lo presupuesto debido a la covid-19--, se le suma el efectuado en la Educación y los fondos para ayudas a los sectores más afectados por la crisis de la pandemia. "Creo que es cómo para pensar qué esfuerzo estamos haciendo también desde la administración en ese ejercicio de corresponsabilidad que pido a la sociedad vasca", ha manifestado Urkullu.

El presidente vasco ha advertido de que la pandemia "va para largo" y es preciso "saber convivir" con el virus. "Quizá no hemos sido conscientes al salir de la primera ola y hemos tenido una excesiva relajación a nivel individual y colectivo", ha opinado, precisando que "no se trata de echar las culpas a nadie", sino de "intentar concienciar".

De este modo, ha subrayado que "cada uno sabe lo que tiene que hacer" para evitar la transmisión comunitaria. "Se trata de autorresponsabilizarnos", ha insistido el lehendakari, que ha remarcado que "la relación social" es la que está sirviendo de "catalizador" del virus y ha apelado a los ciudadanos a mantener "una burbuja social, familiar, de no más de seis personas" y limitarse a ese ámbito.