gasteiz - El Juzgado de Instrucción número 4 de Gasteiz acogió ayer el juicio contra ocho miembros de los sindicatos policiales Jusapol, Jucil y Sipe que se enfrentan a penas de entre 900 y 1.800 euros, cada uno de ellos, por presuntas amenazas y faltas de respeto al parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga, con el que el 4 de abril de 2019 se enzarzaron en una disputa en el Parlamento Vasco, en la que éste les tachó de "nazis" y ellos le reprocharon que "aunque mude de piel, la serpiente sigue siéndolo". La solicitud de estas sanciones fue planteada por la abogada de Arzuaga, Jone Goirizelaia, que reclama multas de 1.800 euros para siete de los acusados por una falta leve de respeto y consideración a la autoridad y por un delito leve de amenazas, mientras que para el único ertzaina procesado pide 900 euros, al imputarle solo una falta leve de respeto a la autoridad. La Fiscalía y la defensa de los acusados solicitan la absolución de todos ellos.
El juicio celebrado ayer responde a la denuncia presentada el pasado 2 de mayo por el parlamentario de la coalición soberanista, que fue registrada a raíz de los incidentes del 4 de abril en la Cámara de Gasteiz y de la "campaña de amenazas e insultos" que, según consta en dicha demanda, Arzuaga sufrió posteriormente a través de las redes sociales. En la vista oral el dirigente de EH Bildu señaló que interpretó el gesto con los dedos pulgar e índice extendidos que hizo uno de los policías como una "pistola" y como la simulación de que "blandía un arma", por lo que se sintió "amedrentado e intimidado". A esa sensación contribuyó la presencia de los representantes policiales en el Parlamento mucho tiempo después de que terminara el debate sobre esa ley y las amenazas que recibió en los días siguientes en las redes sociales. Arzuaga reivindicó su "prerrogativa" como parlamentario a expresar sus opiniones desde el atril y afirmó que en ningún momento profirió "ningún insulto" -aunque usó "palabras gruesas"- y que hizo "una comparativa de la actitud" de estos sindicatos con los nazis y genocidas por "negar la violación de derechos humanos".
negativa policial Policías y guardias civiles negaron haber hecho el gesto de una pistola y precisaron que extendieron el pulgar y el índice para formar la "J" de los sindicatos Jupol, Jucil y Jusapol (que engloba a ambos), un símbolo que "une a todos" los miembros de las FSE y que usan habitualmente en sus movilizaciones.
"Interpreté que con sus gestos simulaban que blandían un arma, y yo no proferí ningún insulto"
julen arzuaga
Parlamentario de EH Bildu