Bruselas. Un grupo de 38 eurodiputados, mayoritariamente de los grupos de los Verdes y de la Izquierda Unitaria, enviaron este martes una carta al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, para pedirle cambios en la política penitenciaria del país en favor de los presos de ETA.
Los firmantes consideran que ese proceso es "más necesario que nunca para la reconciliación y una paz justa y duradera en el País Vasco".
En una misiva que también dirigieron al presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, los 38 eurodiputados señalan que 184 de 205 presos de la banda cumplen condena en centros penitenciarios que están "entre 250 y 1.100 kilómetros de distancia de su hogar", algo que, "castiga a sus familiares y evita una correcta inclusión social".
Los diputados, muchos de los cuales pertenecen al Grupo de Amigos del País Vasco de la Eurocámara, apuntan a una resolución del propio Parlamento Europeo de 2017 que condenaba la "política de dispersión aplicada por algunos Estados miembros" y pedía medidas para que los reclusos fueran trasladados más cerca de sus hogares.
La carta pide también "una solución satisfactoria a los presos que padecen enfermedades muy graves e incurables".
"Hoy en día son 19 los que se encuentran en esa situación. El gobierno español debe hacer cumplir la ley actual y explorar la liberación humanitaria", pide el grupo de eurodiputados, entre los que se encuentran Carles Puigdemont, Toni Comín, Diana Riba, Pernando Barrena o Miguel Urbán.
En una rueda de prensa este martes en la Eurocámara, el eurodiputado danés de la Izquierda Unitaria Europea Nikolaj Villumsen dijo que las instituciones de la Unión Europea "pueden y deben apoyar este proceso" y lamentó que la UE no haya "promovido, acompañado o asistido" el proceso de resolución "de manera efectiva tal y como se esperaba".
El Grupo de Amigos del País Vasco de la Eurocámara reúne a 21 eurodiputados, mayoritariamente Verdes, de la Izquierda Unitaria y no adheridos a ninguna formación, aunque también participan en él el socialdemócrata esloveno Milan Brglez y la belga Assita Kanko, de los Conservadores y Reformistas.
