madrid - Todo hace indicar que el próximo 15 de marzo cuando, con toda probabilidad, sea proclamada nueva presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas mantendrá la deriva a la derecha de la formación naranja. El varapalo sufrido el 10-N al pasar de 57 a 10 diputados, batacazo que se llevó por delante a Albert Rivera, no parece haber surtido efecto en las filas de Ciudadanos, que lejos de tratar de buscar el centro político prefieren seguir alineados junto a PP y Vox.
Según Arrimadas, “hay muchos españoles muy preocupados” con el Ejecutivo formará Sánchez, por las políticas económicas “populistas y comunistas” de Unidas Podemos y por las “cesiones al nacionalismo”. La portavoz naranja señaló que los socios de Sánchez arremeten contra el rey, los jueces y los símbolos nacionales porque “saben que son garantía de unión, libertad, igualdad, solidaridad y convivencia en España, y al atacarlos debilitan la democracia”.
De cara al futuro, Arrimadas consideró que “no vamos a tener estabilidad, ni un gobierno sensato, ni unos socios que piensen en España”. Asimismo, insistió en que a Sánchez “no le ha votado ni un solo español para hacer lo que está haciendo”. En este punto, recordó cómo el candidato del PSOE ha cambiado su discurso respecto a lo que decía sobre Podemos y sobre los partidos nacionalistas antes de las elecciones generales de noviembre.
En definitiva, Arrimadas aseguró que Pedro Sánchez “ha despreciado a los votantes constitucionalistas y ha hecho la pelota a los separatistas”. - J. Núñez