madrid - En principio, el PSOE no tiene intención de evitar a Pablo Iglesias en la nueva ronda de contactos que va a desplegar su candidato a la investidura, Pedro Sánchez. El socialista está reuniéndose con agentes sociales para cerrar un programa que eleve la presión sobre Unidas Podemos, y también quiere amarrar el respaldo de partidos con menor representación en el Congreso, como Compromís y el PNV. Pero, hasta ayer, no había trascendido nada de la cita con Pablo Iglesias. El PSOE asegura que habrá reunión, pero la mantiene aún en una nebulosa. Lo que le va a plantear Sánchez es un “acuerdo programático reforzado”, el nombre que ha decidido darle al documento que salga de su ronda de contactos con los agentes sociales. La cita clave llegará mañana, cuando se reúna con la patronal CEOE y los sindicatos UGT y CCOO. En paralelo, el PSOE cierra filas en torno a Sánchez después de que el PP planteara que diera un paso atrás. Y no parece que el socialista se vaya a reunir con el líder de Òmnium, Jordi Cuixart, a quien recordó que todo su diálogo tendrá lugar dentro de la ley. La portavoz Celaá dijo que esa reunión no tiene nada que ver con la ronda de investidura.
La presidenta del PSOE, Cristina Narbona, despachó ayer en Telecinco como una “ocurrencia” la propuesta del PP. A continuación, recordó que Sánchez ha abierto una ronda de contactos con organizaciones de la sociedad civil para escuchar su visión sobre el “momento actual” y también con los partidos políticos, como el encuentro de anteayer con Compromís, que probablemente votará a favor de la investidura tras los avances sobre la financiación autonómica y la apuesta por reformar el sistema en unos ocho meses. Narbona cree que la ronda se saldará con un acuerdo que permita que Sánchez sea nombrado candidato por el rey y se evite la repetición de las elecciones el 10 de noviembre.
“Desde el PSOE queremos que el presidente en funciones consiga que el rey vuelva a encargarle ser candidato y consiga suficientes apoyos”, dijo. La fecha límite es el 23 de septiembre y el PSOE necesita los votos de Podemos. Narbona confirmó que Sánchez mantendrá una reunión con Iglesias, y que le pondrá sobre la mesa “un acuerdo programático reforzado”. Según dijo, el gobierno de coalición “no fue posible”, y ahora se deben “explorar otras posibilidades”. “Cuando se produzca esa reunión, esperamos que se abran horizontes que hasta ahora no parecían posibles”, concluyó.
El Gobierno de Pedro Sánchez, por otro lado, ha reaccionado a la petición de una reunión por parte la organización independentista Òmnium recordando que su posición sobre Catalunya es la del diálogo dentro de la Constitución. Fuentes gubernamentales citadas por Europa Press subrayaron que esa es la posición ante cualquier formulación que proceda desde las organizaciones independentistas y sus responsables. El presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, que se encuentra en prisión preventiva mientras es juzgado por el proceso independentista, ha pedido por carta a Sánchez que incluya a la asociación dentro de la ronda de contactos con organizaciones sociales que ha emprendido en un intento por elaborar un programa de gobierno actualizado. Las fuentes consultadas no precisaron si la Moncloa ha respondido a Òmnium, pero en ámbitos independentistas se interpretó y se dio por hecho que no habrá encuentro. El president Torra criticó que la disposición al diálogo de Sánchez “tiende a cero”.
Por otro lado, Sánchez continuó ayer su ronda de encuentros con colectivos sociales manteniendo reuniones con la comunidad educativa y colectivos sobre la despoblación. El socialista prometió, al igual que en el discurso de investidura, que la inversión en educación alcanzará el 5% del PIB. - DNA/Europa Press