Madrid - A pesar de las voces discrepantes que desde el lunes se han alzado para reclamar cambios en la estrategia y levantar el veto al PSOE, en la dirección de Ciudadanos siguen firmes en sus planteamientos de no pactar nada con Pedro Sánchez y seguir anteponiendo los acuerdos con el PP y Vox. La portavoz de la formación naranja, Inés Arrimadas, insistió ayer en su negativa a abstenerse y permitir una investidura de Sánchez, y quitó hierro a las fuertes tensiones internas desde que dimitiera el portavoz económico Toni Roldán.
En una entrevista en Antena3, Arrimadas minimizó el conflicto vivido en el seno de Ciudadanos, expresando que “ojalá las crisis fueran por mantener la misma posición”. Así, recordó que el veto a Sánchez salió con unanimidad antes de las elecciones, también con el apoyo de Roldán y otros críticos como los eurodiputados Luis Garicano y Javier Nart, o el dirigente en Castilla y León, Francisco Igea.
“Hay cuatro personas de una Ejecutiva de más de 30 que quieren hacer a Sánchez presidente. En este partido se habla, se debate, se vota y podemos discrepar”, argumentó Arrimadas, recordando que la clara mayoría de la dirección es partidaria de mantener la estrategia.
abstención con pacto previo Sin embargo, las voces críticas insisten en sentarse a negociar con los socialistas de cara a la investidura. Ayer fue el líder en Castilla y León, Francisco Igea, el que defendió que se haga una oferta programática al presidente del Gobierno en funciones, y si este la acepta abrirse a la abstención. Igea cree que sin esa oferta no se puede “desenmascarar” al socialista y reitera que “pactar no es traicionar” los principios de un partido.
“Proponemos hacer a Pedro Sánchez una oferta pública que los españoles entiendan”, dijo, tras lo que compartió el análisis realizado por Toni Roldán a pesar de asegurar que no abandonará el partido porque considera que es “eficaz” para “hacer política”. Igea reiteró que “hablar no es rendirse”, al tiempo que lamentó que actualmente el mensaje político se centre en “la derrota y la humillación” y no en “convencer”. - DNA