Barcelona - Catalunya se tiñó de amarillo sin que esta vez la Junta Electoral pudiese entrar al trapo del color del asunto. Amarillo republicano, el que distingue a Esquerra Republicana, que protagonizó un vuelco en la hegemonía independentista y en el panorama político catalán en su conjunto. Y más, en unas generales. El soberanismo sumó su máximo histórico en este tipo de elecciones (1.626.001 votos entre ERC, Junts per Catalunya y Front Republicà) con 22 escaños, cinco más de los que ostentaban en el Congreso, ganando 510.279 sufragios y 7,7 puntos porcentuales. Y ahí no se añaden los posibles apoyos de los 614.738 apoyos que obtuvo En Comú Podem, también favorable al derecho a decidir. Carles Puigdemont, promotor de la nueva posconvergencia, resistió: sus 497.638 votos y 7 diputados, uno menos que hace tres años, le permitieron revertir las peores previsiones de las encuestas que le situaban entre 3 y 5. Pero, sin duda, el gran triunfador, y por fin haciendo buenos los sondeos, fue Oriol Junqueras y el discurso de campaña de ERC, quizás con una mayor mano tendida hacia Moncloa pero sin olvidar que el debate del referéndum y de los presos tendrá que seguir estando encima de una mesa de negociación.

“En Catalunya al fascismo se le combate y se le destruye en las urnas”, proclamó la victoriosa noche del domingo Gabriel Rufián, a todas luces el número uno de la formación en el hemiciclo dada la situación procesal de Junqueras, quien ayer invitó a complementar este resultado en las municipales y europeas. “Han derrotado a los carceleros”, dijo su compañero respecto al padecimiento de encarcelados y exiliados soberanistas de su partido. “Ha ganado la voluntad republicana y el independentismo. La libertad y la democracia han vencido a la represión una vez más”, añadió Junqueras. “Apenas todo empieza”, avisó. En este contexto, ERC instó a Sánchez a retomar “la mesa de negociación”. La polémica sobre el relator no ha tenido trascendencia interna, y sí el temor a la ultraderecha y al trío de Colón. El PSOE “debe apostar por el diálogo, la negociación y escuchar el mensaje enviado desde una Catalunya que se ha teñido de amarillo porque desea que cese la represión y una solución política que permita a los catalanes decidir su futuro”, valoró la portavoz republicana Marta Vilalta.

“La pelota está en el tejado de Sánchez. Es él quien debe mover ficha”, avisa ERC. “Le pedimos a Sánchez -dijo Rufián- que escuche el clamor de sus militantes en la sede de Ferraz, y esperamos que no traicione sus siglas y a sus votantes, que no pacte con el Ibex 35, la naranja mecánica, o la marca blanca del PP, como se le quiera llamar, que tome nota y se siente a dialogar con nosotros”. Y recordó al presidente español que la ausencia de diálogo “se ha llevado por delante a gente muy importante de este país”, en alusión a los exgobernantes del PP Mariano Rajoy y Soraya Sáenz de Santamaría, . “Por primera vez un partido independentista ha ganado las elecciones generales en Catalunya, y esto indica que el independentismo cada vez es más fuerte”, sin que ello les lleve a optar por el bloqueo.

ERC conquistó los feudos que en 2011 tenía el convergente Duran I Lleida, hoy día azote del independentismo, a la espera de poder dar un bocado a la Alcaldía de Barcelona, donde el domingo superaron en casi 3.000 papeletas al PSC, y ganando en los distritos de Eixample, Gràcia, Sants-Montjuïc, Les Corts y Sarrià-Sant Gervasi. También se impuso en feudos como Vic, Berga, Girona -donde fue alcalde Puigdemont-, Sant Carles de la Ràpita -donde el expresident no pudo votar el 1-O-, Igualada, Sant Cugat del Vallès, Manresa, Vilafranca del Penedès, Olot, Figueres, Lleida?, y subiendo posiciones en el llamado cinturón rojo.

suspensión de los diputados El Supremo tiene previsto permitir la salida de prisión de Junqueras, Jordi Sànchez, Jordi Turull, Josep Rull y Raül Romeva para que los cuatro primeros recojan sus actas de diputados y el quinto, la de senador. Solo puede hacerse en persona y, según lo previsto en la ley de régimen electoral, no hay motivo legal alguno para impedírselo al no haber sido condenados. Otra historia es que puedan ejercer porque el alto tribunal piensa comunicar tanto al Congreso como al Senado que en ambas Cámaras rige, como en el Parlament, la suspensión de funciones para cargo público del artículo 384 bis de la ley de enjuiciamiento criminal para los procesados por terrorismo o rebelión que se encuentran presos. La duda es si correrá la lista de los presos electos.