donostia - El juez de vigilancia penitenciaria ha permitido a Aitzol Gogorza, preso de ETA enfermo, que cumpla en su domicilio el resto de su condena bajo control telemático, según informaron ayer fuentes jurídicas. Gogorza, que está clasificado en segundo grado, se ha beneficiado del artículo 100.2 sujeto al tratamiento del Hospital Universitario Donostia. Sare y Etxerat valoraron de manera positiva la decisión, al tiempo que recordaron que quedan 20 presos gravemente enfermos para los que piden igualmente que sean tratados en casa.
Gogorza fue condenado en 2006 a 20 años de prisión por el intento de asesinato en 1997 del funcionario de prisiones Juan José Baeza, que recibió un tiro en el cuello, y por tenencia de armas. En julio de 2015, la Audiencia Nacional ya le trasladó desde la cárcel de Basauri hasta un centro psiquiátrico penitenciario. Los jueces se oponían entonces a concederle la libertad al considerarlo “una persona muy peligrosa que en libertad representaría un peligro muy evidente para personas y bienes”. Gogorza había solicitado a la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional la suspensión de su condena debido a su estado mental. El preso alegaba desde hacía años que sufría un trastorno obsesivo compulsivo, acompañado de síntomas psicóticos, y un trastorno depresivo que le había llevado en varias ocasiones a intentar suicidarse. Según un informe de 2015 de la cárcel remitido a la Audiencia Nacional, Gogorza mostraba “una adhesión plena a los postulados de ETA y de apoyo a la actividad de la banda”. Así, la Sala de lo Penal de la AN, presidida por Fernando Grande Marlaska, actual ministro del Interior, impuso su ingreso en un psiquiátrico penitenciario y se opuso a la suspensión de su condena. - E.P.
