madrid - La Asociación Española de Abogados Cristianos denunciará ante la Fiscalía el derribo de la cruz de Ondarroa ocurrida la madrugada del día 14 de enero al considerar que es constitutivo de “un delito de odio y otro contra los sentimientos religiosos, además de daños y dejación de funciones por parte del Ayuntamiento”.
En un comunicado hecho público ayer, esta asociación se refiere a la acción de un grupo de desconocidos que derribó con taladros y una rotaflex este monumento. Ernai, las juventudes de Sortu, reivindicó el sabotaje. Erigida en 1958, recordaba a los vecinos que sirvieron en el crucero Baleares, la mayoría voluntarios requetés, muchos de los cuales fallecieron al hundirse el barco, suceso que el franquismo utilizó como propaganda. El Ayuntamiento de Ondarroa y el Gobierno vasco ya habían exigido su retirada previamente, por vulnerar la Ley de Memoria Histórica.
La presidenta de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos, explica que “el derribo fue a plena luz del día, duró varias horas y nadie hizo nada para frenarlo”. Asimismo, recuerda que, precisamente esa Cruz ya había sufrido ataques previos”.
La representante del colectivo cristiano solicita la restitución cuanto antes de un monumento de “similares características” ya que considera que la cruz nunca puede vulnerar la Ley de Memoria Histórica. “En tal caso, lo que puede vulnerar la Ley serían las inscripciones que contenga y habría que estudiar cada caso de forma individual”, señala. - DNA