bilbao - Jesús Loza se hizo eco ayer de las peticiones del PNV y del Gobierno Vasco para que el calendario de transferencias llegue cuanto antes. El delegado del Gobierno español en suelo vasco se tentó mucho la ropa durante la entrevista concedida a Radio Euskadi para evitar pisar otro charco similar al entuerto sobre el plazo de las obras del TAV. Después de que el grupo jeltzale en el Congreso confiara en que el presidente Sánchez presentará el calendario antes del trámite de las enmiendas a la totalidad de los días 12 y 13 de febrero, Loza quitó hierro a los plazos y las demoras, y dijo que lo importante no son diez días más o menos, sino que el calendario se redacte con “rigor” para que no haya disgustos. Dijo que existe “voluntad” por parte del Gobierno español, y también descartó que las presiones del PP y de Ciudadanos con asuntos como el debate catalán vayan a frenar a Madrid a la hora de cumplir el Estatuto de Gernika. Dijo que las cuestiones no están relacionadas.
Loza se sacudió la presión de las transferencias asegurando que las prisas “no son buenas consejeras” y que el plazo de presentación del calendario “no es la cuestión relevante”. Dijo que algunas competencias son más sencillas que otras, y no ocultó que el mayor escollo ahora mismo es la redacción de un eventual apartado referido a la gestión del régimen económico de la Seguridad Social. Por ello, dijo que lo importante no es el plazo, sino actuar “con el mayor rigor posible”. “No vaya a ser que, por firmar un papel, luego tengamos sorpresas desagradables todos”, defendió. A partir de ahí, recalcó que existe una voluntad “clara” por parte de Sánchez para cumplir el Estatuto, y que los dos gobiernos están trabajando “intensamente”.
El calendario de transferencias iba a presentarse a finales del año pasado, pero enero pasa sin que haya novedades. Un escenario posible consiste en que Sánchez esté tratando de incorporar este asunto a la negociación presupuestaria, cuando el PNV prefiere que lo zanje cuanto antes porque fue su compromiso y así el grupo vasco podría abordar con las manos libres la negociación de inversiones en las Cuentas. - M.Vázquez