madrid - Carmen Montón no aguantó la presión. Ni tampoco las últimas revelaciones sobre nuevas irregularidades en su polémico máster en la Universidad Rey Juan Carlos (URJC). Tras resistir día y medio a las informaciones que la ponían contra las cuerdas, anoche finalmente claudicó y dejó paso al que será su sucesora, María Luisa Carcedo. Su renuncia tuvo lugar apenas cuatro horas después de que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, rompiera su silencio y respaldara a la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social argumentando que estaba realizando un trabajo “extraordinario” al frente de su departamento.
La ministra Montón, compareció al filo de las nueve de la noche en el Ministerio de Sanidad para explicar las razones de su renuncia, principalmente para que su situación no suponga un lastre para el Gobierno socialista. “Los españoles y las españolas tienen un magnífico presidente del Gobierno, y para que esta situación no influya le he comunicado mi dimisión”, aseveró.
Tras destacar el “apoyo y afecto” recibido por parte de Sánchez, la ya exministra pasó a defenderse de las acusaciones que han puesto fin a su corta carrera ministerial. Volvió a negar que haya cometido ninguna irregularidad al cursar el máster sobre estudios de género e insistió en su honestidad: “No he cometido ninguna irregularidad, lo he defendido y lo voy a seguir defendiendo con toda la convicción y también con la conciencia muy tranquila”.
Sobre las irregularidades en el máster que cursó en la Universidad Rey Juan Carlos durante el curso 2010-2011, Montón aseguró que “desde el primer minuto” ha dado toda la información que tenía, se ha puesto a disposición de los medios y ha aclarado todo aquello que dependía “exclusivamente” de su responsabilidad.
Pero sus argumentos de defensa no se compadecen con los datos que han ido filtrándose desde el lunes y que sacaban a la luz irregularidades y trato de favor por parte de la dirección del máster universitario. La gota que colmó el vaso fue la revelación de que la ministra plagió en su trabajo de fin de máster (TFM) párrafos enteros de varios autores, al menos cinco, a los que no citó en la bibliografía, según laSexta.
Montón habría copiado 19 de las 52 páginas de su TFM, con numerosos bloques idénticos a los de otros autores, cuyas tesis doctorales y artículos habría encontrado en Internet, e incluso figuraban párrafos copiados textualmente de la página web Wikipedia.
Desde que saltaron a la luz las presuntas irregularidades referentes al máster, Montón no quiso mostrar su contenido. Entre los textos destacan párrafos enteros sacados de un trabajo de Mónica Pérez publicado el 26 de julio de 2004 en el portal de Comunicación e Información de la Mujer (CIMAC) sobre el patriarcado, una organización civil periodística especializada en la perspectiva de género y los derechos humanos de México
También ayer se conoció que la URJC había detectado cambios en las notas del máster que cursó la ministra de Sanidad. Según una información publicada por eldiario.es, Montón no aprobó todo su máster en junio de 2011 ya que, al menos en una asignatura, figuraba un no presentado y posteriormente se modificó por un aprobado.
La universidad con sede en Madrid fija que el alumno tendrá que haber superado todas las asignaturas, entregando para ello “la justificación correspondiente”. También deberá hacer la defensa del trabajo fin de máster de manera pública y presencial. Estos dos requisitos son algunos que supuestamente no habría cumplido Montón en su día. A esas irregularidades se le suman otras como, por ejemplo, que la ministra admitió que apenas iba a clase (cuando se trata de un curso presencial) y que no defendió su trabajo.
Tras hacerse pública la decisión, Sánchez elogió la gestión de Montón y destacó que su dimisión es una decisión “valiente” y que la “honra”. En su cuenta de Twitter, ensalzó su compromiso con la igualdad y la justicia social. “En 100 días has recuperado la sanidad universal en nuestro país, has trabajado sin descanso para devolver y ampliar derechos”, apostilló.
Montón era uno de los pesos pesados de su gabinete y además Sánchez no olvida que la ya exministra fue una de las pocas compañeras que le respaldó cuando le echaron de la dirección del PSOE en octubre de 2016. Esas fueron las razones por la que la mantuvo desde el lunes, pese a que varios dirigentes socialistas y miembros de la Ejecutiva Federal del PSOE, no dudaban en calificar de “error” la decisión de que Montón continuara, cosa que consideraban “inexplicable”. Primero, porque restaba legitimidad a su discurso sobre la regeneración democrática y segundo, porque suponía de modo indirecto echar un capote al presidente del PP, Pablo Casado, cuyo presunto máster fraudulento investiga el Tribunal Supremo.
Podemos reclamó la dimisión del presidente del PP, Pablo Casado, por el caso de su máster en la URJC después de la renuncia de Montón por un caso similar. El secretario de Organización, Pablo Echenique, le pidió que haga públicos los trabajos de su máster que, a su juicio, también podría haber plagiado o haber sido “un fajo de páginas en blanco”. “¿Qué está ocultando el presidente del PP?”, denuncia Echenique.