Bilbao - En un contexto en el que el panorama político estatal está atravesando momentos de gran incertidumbre, sometido a algunos de los desafíos más importantes del periodo democrático a cuenta del proceso soberanista catalán, el primer año de la presente legislatura en Euskadi se ha caracterizado por la “normalidad y estabilidad institucional”. Cuando ayer se cumplió el primer aniversario de la investidura de Iñigo Urkullu como lehendakari, el grupo del PNV en el Parlamento Vasco realizó un balance positivo de la gestión llevada a cabo por el Gobierno Vasco, una etapa “de cumplimiento de compromisos en un clima de normalidad política”, aseguró.

“Iniciamos la legislatura con más diálogo y negociación”, valoró el parlamentario jeltzale Iñigo Iturrate. Agregó que “apostamos por un gobierno de coalición con el PSE que está funcionando bien y cerramos importantes acuerdos en Madrid para la liquidación del Cupo y la actualización del Concierto Económico”. Dicho acuerdo, aprobado el pasado jueves por la amplia mayoría del Congreso de los Diputados, garantiza además “15 años de paz financiera y fiscal”. Destacó así el compromiso del lehendakari con la vía del consenso político y la colaboración, en lo que supone “la apuesta más fructífera y eficaz para seguir construyendo un país justo, equilibrado y solidario”.

Iturrate añadió que, tras la aprobación de los presupuestos de este año, “ahora se trabaja para que Euskadi tenga unos nuevos presupuestos que permitan apuntalar su desarrollo económico y social”. A este respecto, la cuantía del proyecto presupuestario para 2018 aprobado por el Gobierno Vasco es “la más elevada de la historia”, con 11.486 millones de euros, lo que supone un aumento del 3,9%. El PNV destacó además tres claves de las cuentas: garantiza los servicios esenciales, con un 77% de recursos para gasto social; recupera la inversión, que crece en un 7,4%; y asegura la estabilidad, al cumplir con el déficit, la regla del gasto y reducir la deuda.

En un comunicado, el parlamentario vasco aportó datos para sustentar este análisis, incluyendo que el 95% de los compromisos del programa de gobierno están en marcha -166 de 175-; los 11 planes estratégicos en vigor, mientras que los cuatro restantes se aprobarán antes de fin de año; y que de los 28 proyectos legislativos comprometidos, ocho ya están en fase de tramitación en la Cámara vasca. La conclusión, a juicio de Iñigo Iturrate, es que el Ejecutivo “está cumpliendo los compromisos adquiridos con la ciudadanía vasca desde el realismo, la responsabilidad y la solidaridad”.

Recuperación económica Cuando el próximo martes se cumple un año del primer Consejo de Gobierno de la legislatura, el parlamentario del PNV echó la vista atrás en materia económica y aseguró que estos doce meses han confirmado la tendencia a la “recuperación”. “Se crece por encima de las previsiones, crecen la industria, las exportaciones y el turismo, y se está creando empleo”, aseveró. Citó la aprobación del Plan de Reactivación Económica y Empleo 2020, dotado con 8.800 millones de euros, que incluye un Plan de Empleo y que se ha traducido, por ejemplo, en 11.000 personas menos registradas en Lanbide.

En el balance del primer año de mandato de Urkullu, la formación jeltzale presta asimismo especial atención al autogobierno y la convivencia, aspectos que protagonizan sendas ponencias en el Parlamento Vasco. En el primer caso, destacó la aprobación de los informes sobre transferencias pendientes, así como el inicio de la segunda fase de trabajo de la ponencia, que busca un acuerdo sobre los principios sobre los que se sustentará la “actualización” del autogobierno. Iñigo Iturrate calificó el año transcurrido de “intenso” en cuanto a la consolidación de la paz y la convivencia, con hitos como el desarme de ETA y la aceptación por parte de sus presos de las vías legales de inserción. Destacó a su vez la aprobación del Plan de lucha contra el terrorismo internacional de pretexto religioso.