ALICANTE. Catalá se ha pronunciado en estos términos en declaraciones a los medios en Alicante tras presentar el estudio 'Atlas Concursal: radiografía de la insolvencia en España', del Consejo General de Economistas.
Catalá ha indicado a los medios que en la última reforma del Código Penal se introdujo "una mejora del tipo de los delitos de odio y del uso de redes sociales o de los sistemas telemáticos para la comisión de delitos de infamia, calumnia e injurias".
Asimismo, preguntado sobre el nombramiento de un nuevo fiscal general, el ministro ha explicado que el procedimiento "según establece la normativa" requiere de una propuesta del Consejo de Ministros, una informe del Consejo General del Poder Judicial y un informe de la Comisión de Justicia del Congreso de los Diputados.
De modo que, según ha avanzado, la tramitación tiene "unos tiempos" y lo que están haciendo estos días es poner "en marcha el procedimiento" pero sin un "calendario exacto", ha matizado.
Cuestionado por la urgencia de nombrar un nuevo fiscal general debido a la situación de Cataluña, el ministro ha destacado que la Fiscalía "es una institución compuesta por 2.400 fiscales que actúan cada día con absoluta cualificación y profesionalidad" pero que la vacante de fiscal general "no es deseable".
No obstante, Catalá se ha mostrado "seguro" de que la Fiscalía "como institución con todos los profesionales a su servicio y sus reglas de funcionamiento atenderá todas las actuaciones que tengan que llevarse a cabo durante los próximos días, desde lo más cotidiano en todos los partidos judiciales y en todos los juzgados de España hasta lo más estratégico, lo más importante de este tipo de procedimientos ante la Audiencia Nacional y ante el Tribunal Supremo".
En ese sentido, ha concluido que mientras duren los trámites del nuevo nombramiento, la Fiscalía "como siempre va a cumplir su misión constitucional y va a atender todas las cuestiones que tenga pendientes".
