Bilbao - Alrededor de 35.000 personas, según fuentes municipales, se adhirieron ayer en Bilbao a la manifestación convocada por EH Bildu, los sindicatos ELA, LAB, ESK, Steilas, entre otros, y la plataforma Gure Esku Dago. Mostrar el rechazo hacia la aplicación del artículo 155 de la Constitución fue el origen de la convocatoria, si bien los encarcelamientos de los exconsellers del Govern de esta semana capitalizaron una marcha a la que no se adhirió el PNV alegando las “formas en la que se ha gestado la iniciativa”. La negativa a la participación de los jeltzales, precisamente, estuvo en las valoraciones de algunos responsables de las formaciones políticas y sindicales, caso de Arnaldo Otegi o Adolfo Txiki Muñoz.
Detrás de una pancarta bajo el lema 155.aren kontra Demokrazia eta Erabakitze Eskubidea - Contra el 155, Democracia y Derecho a Decidir, los manifestantes -entre los que se encontraba una nutrida representación de EH Bildu y los partidos que conforman la coalición, los sindicatos ELA y LAB y otros partidos que se adhirieron como Podemos Euskadi y Ezker Anitza-IU- arrancaron la marcha en la bilbaína plaza de La Casilla bajo una intensa lluvia. Tras recorrer las principales arterias de la capital vizcaína, el recorrido terminó en el Ayuntamiento. Allí se leyó un manifiesto en el que además de censurar “la gravedad de los acontecimientos que están sucediendo en Catalunya y que afectan a todo el Estado y por tanto también a Euskal Herria”, llamaron a “hacer frente a la deriva autoritaria y antidemocrática de la entente PP-PSOE-Ciudadanos”.
Esa alianza entre formaciones constitucionalistas conforman un frente de Estado “profundamente autoritario, que se ha propuesto destruir cualquier atisbo de democracia, primero en Catalunya y seguidamente en cualquier territorio y contra cualquier pueblo que no asuma de buen grado los principios monárquicos, involutivos y de unidad indisoluble del Estado que ellos imponen”. El texto, leído en euskera y castellano por Zuriñe Hidalgo y el profesor de la UPV/EHU Ramón Zallo, aseveraba que “no es casualidad que dirigentes del PP hayan amenazado con utilizar ese artículo en otros lugares”. La aprobación del artículo 155, asimismo, “ha supuesto la destitución ilegítima del Govern de Catalunya y la usurpación de sus competencias por parte del Gobierno español. Además, Rajoy ha impuesto la disolución del Parlament, depositario de la soberanía democrática de la cuidadanía catalana”.
La segunda de las reivindicaciones fue la exigencia de “la puesta en libertad de los miembros de la sociedad civil catalana Jordi Sanchez y Jordi Cuixart”, presidentes de ANC y Omnium Cultural respectivamente. Pero también reclamaron que “las y los representantes del Govern encarcelados esta semana” fueran liberados a la mayor brevedad posible. “Nos solidarizamos y mostramos nuestro apoyo a todos los cargos políticos catalanes amenazados de prisión por ejercer una acción política que responde a un mandato democrático de la ciudadanía”. En este sentido, se reafirmaron en el apoyo “al camino que Catalunya debe seguir”.
La petición de que todos y cada uno de los derechos civiles y políticos sean garantizados fue el tercer punto del manifiesto. “Más concretamente, reivindicamos el derecho a decidir de Cataluña y de los territorios de Euskal Herria. El origen del problema está precisamente ahi, en la negativa radical por parte del Estado para dar cauce democrático a esa reivindicación. Ni el Estado español, ni el PP, el PSOE y C’s lo aceptan”, agregaron. “Demo cracia es derecho a decidir, en Catalunya y también en Euskal Herria”, concluyeron.
bloque de autodefensa Tal y como lo hiciera en la presentación de la manifestación, la tercera en solidaridad con Catalunya en apenas mes y medio, el coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, invitó a la ciudadanía vasca a edificar un “bloque” de autodefensa que haga frente a “la involución democrática que se va a vivir en los próximos meses”. “Desde nuestro punto de vista, hoy es muy fácil explicar por qué estamos aquí, y lo que nos parece que es difícil explicar es por qué el PNV no está aquí”, abundó sobre la ausencia de los jeltzales. El secretario general de ELA, Adolfo Txiki Muñoz, por su parte, afirmó en referencia al partido de Sabin Etxea que “no se puede gobernar con quien defiende el 155 y mete a nuestros amigos a la cárcel”. Además, se mostró convencido de que el pacto de Estado “formado por PP, PSOE y Ciudadanos” tiene “una pata muy bien asentada en las instituciones vascas”. - I. Fradua
