gasteiz - El director del diario Berria y ex responsable de Egunkaria, Martxelo Otamendi, acudió ayer a la ponencia de Memoria y Convivencia del Parlamento para denunciar que la clase política “miró hacia otro lado” ante el fenómeno de la tortura, y pidió a los partidos que reconozcan que existió y que sabían de dicha existencia para no torturar “dos veces” a los afectados. Otamendi, que fue detenido en 2003 acusado de pertenencia a ETA y posteriormente absuelto, presentó una denuncia por torturas que fue archivada. En 2012, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos condenó a España por no haber investigado dichos malos tratos.

El periodista guipuzcoano se preguntó “cómo pueden convivir un pacto por los derechos humanos con ochocientas y pico denuncias por torturas”. Se refería al Pacto de Ajuria Enea, durante cuya vigencia (1988-1998) se registraron las citadas denuncias, según una investigación del especialista Paco Etxeberria encargada por el Gobierno Vasco. “Es mucho más fácil acabar con la tortura que con una organización armada y clandestina. Sabes quién las hace, contra quién, dónde se hacen, cuándo se hacen y cómo se hacen más o menos”, enfatizó Otamendi, especialmente dolido por las denuncias contra la Ertzaintza, “la policía de nuestras instituciones”. “El pacto de Ajuria Enea fue emblemático, si hubo ochocientas y pico denuncias registradas en ese tiempo eso demuestra que algunos representantes públicos miraron para otro lado”, añadió.

En relación al reconocimiento a estas personas, Otamendi admitió que se han dado avances legales, pero pidió a los partidos que “cuando se haga la lectura del pasado” no se les victimice por segunda vez diciendo: “Te torturaron, pero no lo sabíamos”. En ese sentido, se centró en el caso de la Ertzaintza. “ la Ertzaintza nunca ha detenido a un torturador, es una policía moderna e integral que ha detenido a delincuentes de todo tipo, violencia de género, ETA, fraude fiscal, ataques sexuales a mujeres, prostitución, tráfico ilegal de personas, delitos financieros e informáticos, de todo, todo los delitos salvo uno, tortura, y eso exige una explicación”, subrayó. El director de Berria puso además un audio en la comisión en el que el exconsejero de Interior, Juan Mari Atutxa, admitía que sabía de las torturas que practicaban otras policías ajenas a la Ertzaintza en aquella época.

Otamendi puso además en valor las investigaciones de los agentes de Asuntos Internos de los Mossos d’Esquadra que permitieron descubrir a agentes torturadores, y subrayó que la responsabilidad última de los malos tratos es de los magistrados, más que de la propia policía.

También compareció Iñaki García Arrizabalaga, que ayer no quiso hacer declaraciones. García es hijo del delegado de Telefónica en Gipuzkoa Juan Manuel García Cordero, asesinado por ETA en 1980 . - T.D.