madrid - El Gobierno español no aceptará una respuesta ambigua del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, al requerimiento de que explique si declaró o no la independencia de Catalunya, y si optara por esa falta de claridad, aplicaría la segunda fase del artículo 155 de la Constitución. Fue la la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría quien, en la conferencia de prensa posterior a la reunión del consejo de ministros, subrayó que Puigdemont aún tiene la oportunidad de recuperar la normalidad institucional y poner fin a la inestabilidad. Lo hará, explicó, si antes de que expire el plazo que le ha dado el Gobierno -las diez de la mañana del próximo lunes- asegura que no ha declarado la independencia de Catalunya.

Y el Ejecutivo español no aceptará respuestas ambiguas, como podría ser, por ejemplo, que Puigdemont contestara enviando al Gobierno la transcripción de sus palabras del martes ante el Parlament, donde dijo que asumía el “mandato del pueblo” para que “Catalunya se convierta en un estado independiente en forma de república”, pero, acto seguido, propuso “suspender los efectos de la declaración de independencia” para abrir la puerta al diálogo. “Eso no vale”, advertieron fuentes del Gobierno español , que precisaron que con esa respuesta activarían la segunda fase del artículo 155.

El Gobierno insiste en que, de momento, hay que esperar a conocer la respuesta que ha de dar antes de las 10.00 horas del lunes el presidente de la Generalitat. “En este fin de semana de reflexión, con puente de por medio, tiene la capacidad para restaurar la convivencia entre los catalanes”, señaló Sáenz de Santamaría.

Además, el Ejecutivo del PP no se plantea de momento retirar la intervención de las Cuentas de Catalunya aunque Puigdemont responda que no ha declarado la independencia. El pasado 15 de septiembre el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, anunció un paquete de medidas para controlar los gastos de la Generalitat y que suponían de facto una intervención parcial de las cuentas de Catalunya. Así, asumió el pago directo de los servicios públicos de Catalunya, como las nóminas, la Educación, la Sanidad y los Servicios Sociales.

prórroga Por otro lado, ante su falta de apoyos y el clima poco propicio para negociar en plena crisis territorial, el Gobierno español ha decidido decretar la prórroga de los Presupuestos estatales de este año. Se mantendrá previsiblemente el objetivo de déficit de este año (3,1%) para el próximo ejercicio. Si el próximo año pactara un proyecto, se aprobaría retroactivamente desde el 1 de enero. -Efe