DONOSTIA - Todo apunta a la apertura de un nuevo frente judicial en Gipuzkoa. El Gobierno español ha anulado la desanexión de Itsaso, que se separó de Ezkio en septiembre, negándose en redondo a que pase a ser el municipio número 89 del territorio, tal y como se había constituido en su primera sesión plenaria el pasado mes de enero, en un proceso apoyado por la Diputación de Gipuzkoa.
Madrid alega que no cumple el requisito de contar como mínimo con una población de 5.000 habitantes, algo de sobra conocido por el Ejecutivo foral, que entiende que la competencia es suya, en virtud de una norma foral que exime del requisito de población mínima para los municipios que fueron obligados a unirse en el franquismo y que abogan ahora por la desanexión.
Este proceso ha sido avalado por los vecinos en referéndum y por la propia Diputación. La regulación foral permite a los pueblos anexionados contra su voluntad durante el franquismo volver a recuperar su identidad como municipio si así lo desean.
El Ejecutivo foral valorará hoy ante los medios la nueva medida ante la que cabe interponer recurso. Es el Ministerio de Presidencia y Administraciones Territoriales el que ha anulado la solicitud cursada en el registrado de entidades locales. La Diputación confirmó ayer la desautorización del Ejecutivo español, que llega un día después de la decisión del Gobierno del PP de prohibir la consulta sobre la cesión de instalaciones municipales para la organización de corridas de toros en Donostia.
El anuncio del portavoz del Gobierno español, Iñigo Méndez de Vigo, de oponerse a una consulta que contaba con el aval de 10.000 ciudadanos ha sido valorada como una decisión “inequívocamente política” disfrazada de una argumentación “pretendidamente jurídica”, algo que también se plantea sobre la mesa con la anulación del proceso de desanexión de Itsaso.
Se abre ahora un plazo de dos meses y, en el caso de no llegar a un acuerdo, la Diputación plantearía un recurso ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo, según confirmó ayer Gorka Sasieta, presidente de la comisión gestora que rige el nuevo municipio hasta la celebración de las próximas elecciones locales. “En realidad, no se ha paralizado el proceso. El requisito que alega Madrid es algo que ya sabíamos desde el principio cuando pedimos una valoración jurídica. El asunto es que la competencia es de la Diputación. Nos mantenemos a la espera de su valoración”, expresó el portavoz de la gestora.
El Ejecutivo foral aprobó en el consejo de gobierno del pasado 22 de diciembre el decreto de desanexión de Itsaso tras un proceso que la propia institución guipuzcoana calificó de “ejemplar”. La Diputación ha reconocido que la ley estatal exige para la creación de nuevos municipios al menos 5.000 habitantes, pero ha reiterado que la competencia en esta materia, según el Estatuto de Autonomía, es suya. El Ejecutivo establece para crear un nuevo municipio una población mínima de 2.000 vecinos.
La noticia cogió ayer por sorpresa a los vecinos, a los que la Diputación muestra todo su apoyo. Itsaso tiene una población de 165 habitantes y, tras su bienvenida como municipio, estaba en proceso de recuperar los límites anteriores a su fusión con Ezkio en 1964, lindando con los términos municipales de Azpeitia, Beasain, Ormaiztegi, Gabiria y Ezkio.