MADRID - El ex secretario general del PSOE Pedro Sánchez sigue deshojando la margarita respecto a si presenta su candidatura para volver a liderar el partido, una posibilidad que no anunciará hasta que se ponga en marcha el proceso de primarias y se convoque el Congreso Federal, lo que se producirá casi con total seguridad en el Comité Federal del 14 de enero. Sánchez se limitó ayer a agradecer, a través de un mensaje en Twitter, el apoyo que le brindaron la víspera 68 cargos intermedios socialistas, que en un encuentro en Madrid redactaron un manifiesto en el que le emplazan a dar el paso por la “coherencia” que ha mostrado y como alternativa a las “políticas neoconservadoras” del PP.
“Gratitud inmensa por la confianza. Entre todos/as haremos posible la recuperación del PSOE y de nuestra identidad como socialistas”, se limitó a escribir el antiguo líder en la red social, lo que fue saludado por uno de los impulsores de la reunión del martes en la capital del Estado, el secretario provincial del PSOE de Valencia, José Luis Ábalos, como una forma de decir que “sigue ahí”. De hecho, el diputado desveló que Sánchez le llamó por teléfono ese mismo día para saber qué tal había transcurrido el cónclave. Ábalos le transmitió la petición de los presentes de que no les desprecie y su interlocutor negó que lo haga.
La tibia respuesta al golpe de mano exhibido por los sanchistas alentó, no obstante, la posibilidad de que una tercera vía salga adelante frente al sector oficial, liderado supuestamente por la presidenta andaluza Susana Díaz, y el de los críticos agrupados en torno a Sánchez. De hecho, ayer no fueron pocos los ataques dirigidos contra esta vía intermedia y su supuesta cabeza visible, Patxi López. El alcalde de Dos Hermanas (Sevilla), Francisco Toscano, también presente en la reunión en Madrid, arremetió duramente contra el exlehendakari y dijo que “no veo que Patxi López llegue a la militancia con la convicción con la que llega Pedro Sánchez”. El primer edil de Vigo, Abel Caballero, también rechazó esta opción porque López formó parte del proyecto que llevó a su partido “a este mal resultado”. El rumbo del PSOE “debe trazarse con personas nuevas”, añadió.
A este respecto, el diputado por Gipuzkoa Odón Elorza opinó que esa tercera vía solo tendría una finalidad: desactivar la opción de Sánchez. “No sé qué proyecto tiene detrás más allá de que una tercera vía conlleva la exclusión de Pedro Sánchez”, manifestó en declaraciones a RNE. José Luis Ábalos relativizó a su vez el hecho de que algunos dirigentes hayan dejado de apoyar al anterior secretario general, entre otras cosas porque en las primarias decidirá la militancia, no los dirigentes. Entre dichos cargos que se han descolgado del “no es no” a Rajoy acuñado por Sánchez está su antiguo mano derecha, César Luena. Según algunas fuentes, también han puesto distancia líderes autonómicos como la vasca Idoia Mendia, María Chivite (PSN), Miquel Iceta (PSC), el murciano Rafael González Tovar y la balear Francina Armengol, todos ellos fieles sanchistas en el pasado reciente.
Un nuevo rumbo Mientras, no son pocos los dirigentes del resto de facciones del PSOE que siguen marcando perfil. Es el caso del alcalde de Valladolid, Óscar Puente, crítico con la Gestora que cogió las riendas del partido tras la dimisión de Pedro Sánchez pero que se desmarcó del manifiesto de los 68 sanchistas diciendo que “no hay que empujar a nadie” a presentarse como candidato a secretario general. También los hay partidarios de que Susana Díaz sea la próxima líder del partido, como el alcalde de Vigo, Abel Caballero, quien valoró que Sánchez está percibiendo que su tiempo como secretario general “pasó” y le instó a dar un “paso al lado”. Insistió en que pedirá a Díaz que se presente a las primarias y abogó por un “nuevo rumbo” para el PSOE con “dirigentes nuevos”.
Los partidarios del exsecretario general siguieron defendiendo su candidatura, y así Odón Elorza dijo que “no está amortizado”. “No vemos a otra persona que tenga más capacidad y más proyecto de futuro”, agregó, y argumentó que “ha dado ejemplo de coherencia personal y de compromiso”. Para el exalcalde de Donostia, Sánchez “reúne condiciones” para construir un liderazgo que haga “incluyente” al PSOE y recuperar así a los “votantes moderados”. José Luis Ábalos advirtió por último de que el “capital político” de Sánchez no es fácilmente transferible, puesto que se basa en decisiones que adoptó él, como su “firmeza” en el no al PP. Por eso ahora le apoyan personas que antes no estaban de su parte, como la corriente interna Izquierda Socialista.