bilbao - La izquierda abertzale puso ayer sobre la mesa su planteamiento para negociar un acuerdo que dote de estabilidad a un nuevo gobierno de Urkullu durante toda la legislatura. Y su enfoque choca con el del PNV, lo que en principio aleja la opción de un acuerdo entre ambas partes. No cree que tenga que realizar un ejercicio de autocrítica como le piden los jeltzales como paso previo para explorar acuerdos de estabilidad, ni ve viable el juego de alianzas que ha perfilado el PNV, donde el lehendakari buscaría acuerdos con la izquierda aber-tzale y los socialistas alternativamente o de manera simultánea. EH Bildu no lo ve posible porque el PSE no defiende el derecho a decidir, e insiste en el tripartito con Elkarrekin Podemos. Si no cuajara, estudiaría presentar su propia candidatura a Lehendakaritza, lo que supondría escenificar el divorcio y rompería la baraja del acuerdo. En ese contexto, anunció por sorpresa que mantendrá una reunión hoy mismo con Podemos para explorar acuerdos para la próxima legislatura, todo ello cuando aún no ha acabado la ronda de contactos del PNV y cuando está pendiente una segunda cita con la izquierda abertzale. No obstante, fuentes jeltzales consultadas por DNA rechazaron realizar comentarios, quitaron hierro a la cita de la izquierda y la encuadraron en la normalidad parlamentaria.
Entrevistado en Onda Vasca, el parlamentario de EH Bildu Iker Casanova insistió en la apuesta del gobierno tripartito para defender el derecho a decidir y el rescate social. “Si las cosas salen tal y como proponemos, no estaríamos en la tesitura de presentar candidato o candidata. En el caso de que esta propuesta sea rechazada, evidentemente abordaremos la situación y trataremos de representar el proyecto de EH Bildu de la mejor manera posible, pero es un plan B y, por lo tanto, no lo hemos puesto aún sobre la mesa”, dijo. Sobre la posibilidad de que el PNV busque acuerdos con el socialismo y con la izquierda aber-tzale, vio “complicado jugar a dos barajas”.
“Hay que constituir un gobierno en función de lo que se quiera hacer a lo largo de la legislatura y, si lo que se quiere es construir esa nueva arquitectura institucional basada en el derecho a decidir, me parece que el PSE es un compañero de viaje complicado y que no iban a aceptar dar soporte a esa acción de gobierno. Apoyarse en el PSE y construir un nuevo estatus basado en derecho a decidir son opciones incompatibles”, zanjó.
En cuanto a la condición previa del PNV sobre paz, dijo que EH Bildu “tiene absolutamente los deberes hechos en ese aspecto”. “No significa que no se pueda seguir avanzando. Todos estamos interpelados a seguir trabajando. Pero no creo que EH Bildu sea una formación que por su posicionamiento deba quedar excluida de ningún tipo de acuerdo. Escucharemos lo que el PNV nos trasmita, pero entendemos que esa cuestión está mas que resuelta. Veremos si se están planteando nuevas exigencias o se está trabajando el capítulo de las excusas por parte del PNV (...). No sé si se recurre a una excusa para ocultar una voluntad de no acordar”, interpretó.
discrepancias EH Bildu insistió en un acuerdo a tres con Elkarrekin Podemos, un gobierno a la navarra que no terminan de ver ninguna de las otras dos partes implicadas. Lo ha descartado el partido morado, por su voluntad de desalojar al PNV. Pero tampoco seduce a los jeltzales, que no ven una argamasa clara que mantenga unidos a los socios más allá del derecho a decidir. Además, supondría gobernar con dos partidos que suman en conjunto un escaño más que el PNV y que podrían plantear una pinza de izquierdas en la gestión del día a día. EH Bildu tampoco ha atendido la condición previa del PNV para negociar la estabilidad. Los jeltzales le reclamaron un diagnóstico común sobre la paz y lo que ha supuesto la violencia de ETA.
EH Bildu y PSE son los dos partidos con los que el PNV va a explorar un acuerdo de estabilidad para aprobar los Presupuestos y las principales leyes. La izquierda abertzale le garantizaría una mayoría absoluta, aunque tienen discrepancias en materia de paz. Con el socialismo, se quedaría a un escaño de esa mayoría, pero no cree probable que el resto de la oposición se confabule contra las propuestas del lehendakari porque su composición es heterogénea e incluye al PP. Con el PSE gobierna ya en coalición en diputaciones y ayuntamientos y hay sintonía.
EH Bildu, por su parte, tendrá una cita hoy con Podemos para tantear las posibilidades de trabajo en común. La reunión se celebrará a las 11.30 horas en el Parlamento, a iniciativa de la izquierda abertzale. Aunque no sea posible el gobierno tripartito, esperan acordar cuestiones puntuales.