El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, pedirá que el Comité Federal del partido decida hoy si crea una gestora que se decante por una abstención y permita que gobierne el PP o mantiene su propuesta de que sean los militantes en un Congreso los que decidan el rumbo del partido.

Así lo anunció Sánchez en una comparecencia sin preguntas que fue convocada por sorpresa y que tuvo lugar pasadas las 20.30 horas en la sede del partido en la madrileña calle Ferraz, a donde el secretario general llegó unos minutos antes. Sánchez mostró su preocupación por la situación que atraviesa el partido y pidió “altura de miras y serenidad” para que la cita de hoy sábado no se dedique a “interminables” discusiones reglamentarias.

Según dijo, lo que el partido tiene que decidir es su posición ante una investidura del presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, porque “ésta y no otra es la cuestión de fondo” y “el auténtico debate” que hay que tener. “O se monta una gestora, como algunos pretenden, para que lleve al PSOE a que gobierne Mariano Rajoy a través de la abstención, o deciden los militantes en un congreso y mantenemos el no a Rajoy e intentamos un gobierno alternativo de cambio y transversal, como aprobó el Comité Federal”, señaló el líder del PSOE. Sánchez defendió, además, que él no puede “administrar” una decisión que no comparta. Esto supone que si el Comité Federal se inclina por la gestora, él dejará de estar al frente del partido. “Si el Comité Federal decidiera cambiar su posición y pasar a la abstención, obviamente, yo no podría administrar una decisión que no comparto. Si algo me enseñaron mis padres es que lo único que tengo y lo único que debo preservar es mi palabra y son mis convicciones”, aseguró.

Fuentes socialistas explicaron después que, con su mensaje, Sánchez había querido “centrar el debate” del sábado. No se trata de un cambio del orden del día, explicaron, sino que se mantiene lo previsto en la convocatoria del pasado jueves. Es decir, que se someterá a votación convocar un congreso en noviembre, con primarias el 23 de octubre, y se entenderá que si Sánchez no logra sacar adelante esta propuesta, dará un paso atrás para que se monte una gestora.

En su primera comparecencia pública tras la dimisión de 17 miembros de la Ejecutiva Federal que ha sumido al PSOE en una crisis sin precedentes, Sánchez defendió la “hoja de ruta” que decidió el Comité Federal para oponerse a una investidura del líder del PP, Mariano Rajoy. Aseguró que “nunca” ha “creído” que los compañeros que han defendido que el PSOE facilite la gobernabilidad estén “más cerca de la derecha”, pero advirtió de las “consecuencias” que tendría una abstención, y el error que supondría para millones de votantes de socialistas. “La abstención abriría la legislatura del chantaje y el PSOE no podría bloquear los presupuestos del estado o las leyes mas importantes que presentara el gobierno de Rajoy”, añadió.

Sánchez reivindicó que el PSOE tenga como “única voz” la de los militantes, porque son “la base de la organización”, un “ejemplo” para todos los dirigentes socialistas y porque, “sin ellos, no existiría el PSOE”.

Además, el líder socialista agradeció los “múltiples” mensajes de apoyo recibidos y proclamó que una de sus funciones como líder socialista es “reivindicar el debate”. “En una organización de izquierdas el debate es sano, nunca es fractura”, destacó para, acto seguido, abogar por debatir “hasta la extenuación”.

El orden del día del Comité Federal extraordinario que se celebra hoy tiene dos puntos: dar cuenta de las 17 dimisiones en la Ejecutiva Federal y debatir la propuesta de Sánchez de que haya primarias en octubre y un congreso en noviembre para designar a la nueva dirección. Ferraz precisó que aunque Sánchez reclamó ayer concretar si el PSOE se tiene que abstener o no ante Rajoy, no supone alterar el orden del día de la reunión, sino “centrar el debate”, informaron fuentes de la dirección en funciones.

La postura de Sánchez contrasta con la de los críticos, que quieren que el Comité Federal debata el nombramiento de una gestora que tome las riendas del partido al considerar que la Ejecutiva está disuelta y Sánchez ya no es secretario general.

Los detractores también quieren que se apruebe la convocatoria de un congreso extraordinario, pero no ya, sino después de que se forme gobierno.

congreso cuanto antes Sánchez subrayó que parece “razonable” que el congreso se celebre cuanto antes para que las bases elijan al nuevo líder, al igual que ocurrió en julio de 2014 cuando fue elegido secretario general. “Esa puerta abierta a una mayor democracia no puede cerrarse, no debe cerrarse. Debe permanecer abierta y voy a defender que la puerta al voto de la militancia permanezca abierta para nunca más cerrarse”, prometió en su declaración leída ante los medios.

Sánchez no intervendrá hoy al comienzo del Comité Federal puesto que en el orden del día de la reunión no se ha incorporado el punto relativo al informe del secretario general, que sí aparecía en la convocatoria de la sesión aprobada el pasado lunes por la Ejecutiva.

Al cierre de esta edición, la secretaria de Organización del PSOE en Castilla y León, Ana Sánchez, había informado de que la comisión ejecutiva autonómica del partido había decidido por la tarde, con el 90% de los votos, apoyar la tesis de Sánchez en el comité federal. - Efe/E.P./DNA