madrid - Desde las elecciones generales del 26-J, Pedro Sánchez ha optado por mantener un perfil bajo ante el paulatino avance de las negociaciones entre PP y Ciudadanos y las guerras internas en el PSOE. El secretario general socialista ha querido pasar desapercibido y sentarse a esperar a que Rajoy se lance a la piscina en una sesión de investidura tal y como él mismo hizo en la fallida XI Legislatura. En Ferraz esperan que los populares acepten las condiciones esgrimidas por C’s y se convoque finalmente la votación en el Congreso, para la que siguen anunciando su rotundo rechazo. Previendo ese movimiento, hoy se celebrará una reunión de la Comisión Permanente en la que Sánchez reaparecerá públicamente después de varias semanas alejado de los focos. La intención parece clara: reafirmar una vez más su negativa a abstenerse. A pesar de las voces internas y externas que llaman a los socialistas a facilitar la formación de un nuevo Gobierno, la cúpula no da su brazo a torcer y la reafirmación se producirá en un órgano sin notas discordantes, pues todos sus integrantes pertenecen al núcleo de confianza de Sánchez.

En el encuentro de la Comisión Permanente no está previsto que se hable sobre una hipotética alternativa a Rajoy liderada por el PSOE tal y como reclaman algunas voces de la propia formación y, sobre todo, de Unidos Podemos. Esa opción ha sido descartada en numerosas ocasiones ante la necesidad de recurrir a formaciones nacionalistas e independentistas y el fracaso de las pasadas negociaciones a tres con Ciudadanos, pero para Miquel Iceta no es la única solución posible. Según el primer secretario del PSC, puede haber vías distintas como otro candidato del PP, de otro partido o incluso una figura independiente. “La idea de que la única alternativa a Mariano Rajoy pasa por unas terceras elecciones es falsa, equivocada y, además, en cierto modo, perversa”, indicó Iceta. Sin embargo, al mismo tiempo, precisó que “es difícil pensar” que el PSOE apoye a otro aspirante popular. - X. G.