donostia - Ciudadanos entró ayer en la escena electoral vasca con su primer acto. Celebrado un mitin en la plaza Gipuzkoa de Donostia, los representantes de la formación naranja realizaron un alegato en favor de romper la “falsa dicotomía” de “vascos de primera y de segunda” impulsada por el nacionalismo. “Los nacionalistas intentan hacer creer que solamente el separatismo puede representar a la ciudadanía”, ahondaron para después avanzar que dedicarán sus esfuerzos a solucionar los “problemas reales” huyendo para ello de posturas extremistas para abrazar la centralidad.
El aspirante al Congreso por Álava, Rodrigo Zamora, apuntó que “los vascos también sufrimos el paro, la precariedad laboral y la crisis económica, al igual que el resto de españoles, y esto es lo que a Ciudadanos le importa de verdad”. En ese mismo sentido, el cabeza de lista por Bizkaia, Alberto Carril, profundizó en que existen “problemas reales a los que tenemos que dar solución, de forma urgente”, por lo que postuló a su formación como “alternativa para que esto sea posible”. Por último la candidata por Gipuzkoa, Esker Sánchez, puso el foco en “la corrupción y la impunidad” frente a una clase media trabajadora que “ha sido la más damnificada” por la recesión. “Ofrecemos propuestas trabajadas y sensatas ante estas problemáticas; y no ocurrencias publicitarias”, resumió.
Sin la fuerza que la formación emergente tiene en otras zonas del Estado, Ciudadanos busca lograr un escaño en la CAV. Su mensaje en Euskadi pasa por exponer la cintura pactista mostrada tras el pasado 20 de diciembre por su líder, Albert Rivera, en las fallidas intentonas de gobernar junto al PSOE. “Ciudadanos ha demostrado su capacidad para pactar con otras fuerzas que es lo que esta nueva etapa política necesita”. “Diálogo, sensatez, centralidad y regeneración”, resumió el portavoz vasco, Nicolás de Miguel. - DNA