MADRID - Sumidos en un intenso cruce de ofertas y contraofertas sin haber alcanzado una fórmula óptima para ninguna de las dos partes, Podemos puso cifras a la concesión efectuada a IU para integrar a miembros del segunda partido en la confluencia electoral que conformarán para las elecciones del 26 de junio. El secretario de Organización de la formación morada y responsable de las negociaciones, Pablo Echenique, desveló ayer que cederán 9 puestos de salida a representantes del partido de Alberto Garzón: cinco les llevarán a obtener escaño seguro en el Congreso, y otros cuatro tendrán altas probabilidades. Será así siempre que la confluencia electoral iguale los resultados cosechados por separado en el paso por las urnas del 20 de diciembre pasado.
“Si olvidamos definiciones poco sólidas y hablamos claro, se ofrecieron 9 puestos al Congreso con altas posibilidades de convertirse en escaños”, resumió Echenique en un escrito en su página web en el que habló claro sobre los puestos de salida -que según él “no existen”- que durante las últimas jornadas tanto están dificultando las negociaciones. Sea como fuere, la oferta de Podemos “supone, por tanto y con altas posibilidades, multiplicar la representación actual de IU en ambas Cámaras por 7, pasando de 2 y 0 respectivamente a 9 y 5”. Ello le permitiría contar con grupo propio -en el Senado también-, beneficiándose del bonus que supone abandonar el coto que habitualmente suele tener el Grupo Mixto en ambos hemiciclos.
Echenique detalló que la mano tendida de Podemos, lejos de “tanta espuma, tantas prisas y tantas declaraciones cruzadas” entre ambos bandos, incluye dos “puestos de salida plus”, como lo define, que conllevaría insertarse en posiciones altas en la lista “de lo que es estrictamente necesario para obtener el escaño” teniendo en cuenta los resultados”. Otros tantos emplazamientos “de salida sin plus”, que se convertirían en sillón en el Congreso si se repitiesen los resultados del 20-D concurriendo juntos y otros cuatro a los que les separarían bajos porcentajes para ser realidad.
El número tres de la formación morada hizo llegar esa propuesta el pasado viernes si bien IU, que apostaría por hacerse con una horquilla de 8 a 12 puestos de salida -según avanzó el sábado Alberto Garzón-, dio largas a esa posibilidad. De hecho, y pese al Consejo Federal celebrado ese mismo día, aún no han dado luz verde a la propuesta de representatividad de sus siglas en la confluencia. Lo que sí tienen claro ambos partidos de izquierdas es que su unión propulsará a ambos, aunque Echenique apunta que “es imposible que los resultados sean exactamente los mismos”. “Cualquier sociólogo sabe que sumar votos, así sin más, es una mera estimación” y que “tanto los compañeros de IU como la gente de Podemos” albergan “la convicción de que un acuerdo entre ambas fuerzas vaya más allá de la suma, ilusionando y multiplicando resultados”, avanzó.
La semana que hoy se abre, además de sendas consultas de Podemos a la militancia, será definitoria para cerrar la confluencia. El viernes expira el plazo legal para realizar los trámites, por lo que el acuerdo debería de ser inminente.