Donostia - Podemos ha reventado la mesa de las cuatro patas políticas en Euskadi. ¿Lo ve así?

-Parecía un mapa grabado en piedra y absolutamente inamovible, pero los resultados de las elecciones generales del pasado diciembre marcaron un antes y un después. Y considero que es más sano, mucho más democrático, que sea así.

¿Cuándo empezarán los contactos con otros partidos?

-Primero pondremos en marcha el Consejo Ciudadano y en un plazo muy breve empezaremos una ronda como toma de contacto con los diferentes partidos. Queremos hablar con todos, desde luego.

¿Podrían formar una confluencia vasca con partidos de izquierdas?

-La experiencia con Equo en las elecciones generales fue muy enriquecedora. No nos cerramos en absoluto a plantear esa posibilidad.

Aunque sutiles, desde algunos partidos ya les han lanzado algunos guiños...

-Es claro ejemplo de que tenemos un papel protagonista en la política vasca. Tenemos cultura de llegar a acuerdos, y probablemente haya cuestiones en las que nos podremos encontrar en el camino tanto con unos como con otros. Aunque lo que sí tenemos claro es que un gobierno de cambio pasa porque el PNV no gobierne durante le siguiente legislatura.

¿Aún así, no es contradictorio pedir una abstención al PNV para facilitar un gobierno ‘a la valenciana’ en Madrid y ponerlo como rival a desbancar en Euskadi?

-Creo que no. Para Euskadi es importante que el PP no gobierne, y creo que eso debe de ser una prioridad. El PNV, obviamente, estará de acuerdo con nosotros.

¿Vería posible una alianza postelectoral con EH Bildu?

-Desde Podemos Euskadi tenemos un proyecto propio y un ese es el camino que vamos a seguir. Habría que ver que mapa postelectoral queda, pero es verdad que con EH Bildu podemos tener algunas materias -economía o temas sociales- con puntos en común, pero otros que no. Habrá que verlo, en todo caso. - I. Fradua