Bilbao -El reguero de acusaciones mutuas entre miembros del PP por el caso abierto en Bizkaia continúa en ebullición. Arturo Aldecoa, tesorero del partido en el herrialde y que ayer fue apartado de las Juntas Generales por unas supuestas irregularidades en la caja de la formación, apuntó ayer a la existencia de “una cacería” contra su persona en la que “tiran a matar” para “controlar la provincia y los puestos electorales”. No dio nombres, aunque en algunos ámbitos se apunta a una conspiración contra el líder en Bizkaia, Antón Damborenea, con quien ha tenido siempre una estrecha relación de confianza y amistad.

Aldecoa sigue defendiéndose públicamente y avaló que no pondrá objeción alguna a que “revisen su patrimonio” como forma para determinar si realmente se hizo con una cuantiosa suma de dinero -algunas fuentes apuntan que habría efectuado “inusuales” gastos anuales “no justificados” superiores a 100.000 euros desde 2012, que habrían sido llevados a cabo “sin control alguno”- durante su desempeño como gestor del aparato popular, una labor interna que arrancó en 1983. El otro señalado por el caso es el contable Gonzalo Pontes. El ya exjuntero aseguró esperar que “esto se acabe de una vez porque hace un daño inmenso al partido”, si bien remarcó que él no es “la pieza a cazar”, ya que es “una persona de nivel muy intermedio” y tiene “un cargo no muy relevante”. De la misma forma, ahondó en que la polémica abierta en las filas del PP vizcaino apunta más alto. El presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, no obstante, ha cerrado filas con Damborenea y todas las voces parecen endosar la responsabilidad al exgerente. “Tiene otra profundidad”, insistió ayer el extesorero apuntando más alto al incidir en que “el objetivo es el control de la provincia y los puestos electorales”. “Y claro, para ciertas personas esos objetivos justifican tirar a matar, en este caso, a la estructura, a mí o a un compañero”. Metido en una “guerra de otro nivel”, Aldecoa se mostró esperanzado en que “todo este asunto se acabe porque hace un daño inmenso al partido”. “Tengo unos compañeros excelentes, pero hay otros que no son tan excelentes. Es el problema”, dijo.

El portavoz popular, Javier Ruiz, apuntó ayer que los auditores de Madrid que auscultarán las cuentas de la discordia llegan hoy a Madrid. En caso de que se confirmen las irregularidades, avanzó que el PP pedirá que entregue su acta de juntero al partido y “otra cosa es que él la quiera entregar o no”. - DNA