pamplona - El Parlamento de Nafarroa tomó ayer el compromiso de elaborar y aprobar una ley foral de participación que incluirá también la regulación de consultas ciudadanas, los presupuestos participativos y fórmulas de reprobación política. Fue una de las resoluciones aprobadas ayer en el primer Pleno monográfico de esta legislatura, dedicado a ahondar en el derecho a decidir de la ciudadanía navarra. Un Pleno en el que, además, se aprobaron otras 21 resoluciones, entre las que destaca también la referida a abrir un proceso participativo para reformar el Amejoramiento y definir el estatus político de Navarra, incluir nuevas competencias y avanzar en el reconocimiento de derechos sociales, dándoles el mayor rango legal posible. Estas dos resoluciones fueron presentadas por los cuatro grupos que sustentan al Gobierno de Uxue Barkos, al ser cuestiones recogidas en el acuerdo programático y defendidas a ultranza por estas formaciones. Además de estos dos aspectos, que se refrendaron cada una en cuatro ocasiones a pesar de los votos en contra de UPN, PSN y PPN, salieron adelante otros compromisos del pleno, principalmente dirigidos a defender el autogobierno y la capacidad de decisión y acción de los navarros, y a ahondar la pelea por retirar los recursos del Constitucional.

La sesión, celebrada a iniciativa de EH Bildu para promover una mayor implicación ciudadana en la toma de decisiones y una mayor autonomía de Nafarroa para defender sus intereses propios, fue llevada por parte de los grupos de la oposición al único ámbito del derecho de autodeterminación. Desde UPN, pasando por el PSN y hasta el PPN, trataron de deslegitimar la iniciativa y venderla como si fuera a debatirse en exclusiva sobre la fórmula para abrir vías para la integración de Nafarroa con la CAV. Por contra, los grupos que apoyaron la celebración del Pleno (Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e Izquierda-Ezkerra) defendieron la importancia de profundizar en la democracia y establecer los mecanismo para que Nafarroa pueda decidir “cómo quiere gestionar sus recursos, qué proyectos son estratégicos, qué modelo social y económico quiere, qué modelo educativo, su relación con el Estado y con el resto de territorios”. “Nadie puede negar que el derecho a decidir da más legitimidad a las decisiones que se adoptan”, dijo Bakartxo Ruiz, en nombre de EH Bildu, para añadir que “tenemos que servirnos de instrumentos de defensa para reforzar nuestro autogobierno y sobreranía”. “Esta debería de ser la hoja de ruta de cualquiera que se considere demócrata”, zanjó.

En el mismo sentido, Koldo Martínez, de Geroa Bai dio “un sí rotundo al derecho a decidir” porque “Navarra será lo que quieran sus ciudadanos”. El portavoz de la coalición destacó que este posicionamiento “no supone estar a favor de la independencia o de la ruptura”, sino que puso el énfasis en que es necesario defender el autogobierno y a “Navarra como sujeto” para llegar a un pacto “de iguales” con el Estado.

Laura Pérez, de Podemos, igualmente criticó “las visiones reduccionistas que asocian este derecho democrático a ser o no ser un Estado independiente”. Desde I-E, José Miguel Nuin, expresó su compromiso con el autogobierno y el derecho a decidir de la ciudadanía, antes de matizar que no estarán “en una vía vasca o navarra por la independencia”. Para UPN se busca “que en Navarra ocurra lo mismo que en Catalunya”; y María Chivite, del PSN, enfocó los argumentos en la línea de UPN.