BILBAO. En declaraciones a Onda Vasca, recogidas por Europa Press, la parlamentaria popular ha manifestado además que, en las próximas elecciones generales, la ciudadanía va a "valorar" el trabajo realizado por el PP desde el Gobierno español y las reformas llevadas a cabo "para dar vuelta a una situación muy crítica".

Tras advertir de que la cuestión catalana es "un desafío a la democracia, al orden constitucional y la convivencia", ha remarcado que el Gobierno de España ha apostado por "la unidad con el resto de fuerzas políticas" y está "haciendo bien las cosas desde la firmeza, la proporcionalidad, la mesura y la serenidad".

No obstante, ha subrayado que el Ejecutivo español tiene claro que "no se puede cuestionar un estado de derecho ni admitir órdagos".

A su juicio, Artur Mas está actuando "a la desesperada y claudicado ante las exigencias de la CUP". Además, ha lamentado que se está poniendo "en riesgo la convivencia en Catalunya".

"Están haciendo el ridículo; es un despropósito. Se da la contradicción de que se aprueba una declaración soberanista cuando no está conformado un gobierno que resuelva los problemas de los ciudadanos de Catalunya", ha afirmado para añadir que los partidarios de la independencia "no tienen el aval ciudadano cuando en las pasadas elecciones el 52 por ciento votó claramente no a favor de procesos de ruptura".

ELECCIONES

Por lo que respecta a las perspectivas electorales del PP, Garrido ha recordado que en los últimos comicios municipales y forales la formación popular fue en Araba primera fuerza política tanto en el Ayuntamiento de Gasteiz como en las Juntas Generales, aunque "en Bizkaia y Gipuzkoa no tuvimos los resultados que esperábamos".

No obstante, ha expresado que el escenario en las elecciones generales es distinto y ha considerado que la ciudadanía va a "valorar" lo realizado por el PP desde el Gobierno central y "las reformas para dar vuelta a una situación muy crítica".

En este sentido, ha defendido que se ha comenzado un camino y para que éste continúe el PP "debe seguir en el Gobierno de España", ya que, a su juicio, "no hay un proyecto sólido de alternativa que no sea el de la unión de múltiples partidos que no sabemos que proyecto tienen para resolver los problemas".