barcelona - La entrategia de Mariano Rajoy sobre la situación catalana ha encontrado un gran aliado. La gran patronal bancaria española ha entrado de pleno en la campaña de las elecciones catalanas, y lo ha hecho para advertir de los “riesgos” que para la estabilidad financiera supondría un proceso de independencia y para lanzar una apuesta por preservar “en todo momento” el orden constitucional vigente. Además, amenaza con la posibilidad de irse de Catalunya si se sigue adelante con el proceso de segregación del Estado español. A través de una declaración conjunta. las dos principales patronales bancarias AEB y CECA -donde están integradas entidades como Caixabank, BBVA, Banco Santander, Sabadell o Bankia- advierten de que la exclusión de Catalunya de la zona euro, lo que dan por hecho si se produce un proceso de independencia, comportaría “graves problemas de inseguridad jurídica” para las entidades bancarias. Así, no dudan en lanzar una seria advertencia: de darse el proceso de segregación los bancos “reconsiderarían su implantación en Catalunya”, lo que a su entender, podría generar una reducción de la oferta bancaria y un encarecimiento y escasez del crédito.

Por ello, las patronales bancarias apuestan de manera firme por “preservar en todo momento” el actual orden constitucional. “De todo otro modo, se pondría en grave riesgo el objetivo de las entidades, que no es otro que proteger a sus depositantes y mantener el flujo de financiación a familias, pymes y a los sectores productivos generadores de empleo del país”, señalan en la declaración, en la que, finalmente, hacen un llamamiento a los líderes políticos para que impulsen las reformas que permitan “seguir progresando en la construcción de mayores niveles de bienestar”.

también los empresarios En esta estrategia de toma posición contra las posiciones soberanistas, a la declaración de la patronal bancaria se sumó, también ayer, una declaración del Círculo de Empresarios de España en la que se advierte de “los gravísimos daños” para la economía española y catalana en el caso de que “hipotéticamente prosperase la pretensión separatista”.

En la declaración los empresarios inciden en el hecho de que Catalunya no estaría presente en los principales organismos internacionales, a lo que se sumaría una “deslocalización de empresas” allí erradicadas, lo que conllevaría una caída de las inversiones, la renta per cápita, el nivel de empleo y, en definitiva el estado de bienestar social. En su declaración, el Círculo de Empresarios hace un llamamiento a la ciudadanía catalana para que “evite con su voto emprender un camino de difícil retorno”.

El presidente del Círculo de Empresarios, Javier Vega de Seoane, afirmó en el acto de presentación de esta declaración que los empresarios, ante la cercanía del 27-S y frente a una dinámica que calificó de “tirarse por la ventana”, han decidido reaccionar, “aunque tarde”.

Vega de Seoane se refirió también a la postura mantenida por los empresarios catalanes y aseguró que le consta que muchos de ellos “se han movido por debajo de las mesas” para tratar de reconducir esta situación. A su entender, la mayoría del empresariado catalán está “horrorizado” ante la posibilidad de una Catalunya independiente y señaló que quienes se han posicionado a favor de la opción soberanista ha sido por tener una posición “cómoda”.