GASTEIZ. La boda civil, en la que solo han estado presentes los testigos, ha tenido lugar en torno a las 9.30 horas en el despacho que Maroto tiene en el consistorio de Gasteiz como portavoz municipal del PP y ha sido oficiada por el edil popular Miguel Garnica, han informado a Efe fuentes de esta formación.
El acto, que apenas se ha prolongado unos minutos, se ha limitado a la firma de los documentos que acreditan a Maroto y a Josema Rodríguez como matrimonio, ya que la pareja tiene previsto celebrar esta tarde en un restaurante de Gasteiz una ceremonia no oficial a la que asistirá la cúpula del PP con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy a la cabeza.
También acudirán la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría; el director del Gabinete de Presidencia, Carlos Floriano, además de la secretaria general de los populares, María Dolores de Cospedal, y los cuatro vicesecretarios del partido: Javier Arenas, Fernando Martínez-Maíllo, Andrea Levy y Pablo Casado.
Maroto también contará en su boda con el respaldo de numerosos cargos del Partido Popular de Euskadi, entre ellos, su presidenta, Arantza Quiroga.
En un principio Maroto tenía previsto casarse en el salón de bodas del Ayuntamiento a las ocho de la tarde, pero finalmente optó por un acto íntimo por la mañana y una boda no oficial por la tarde para no "entorpecer el trabajo de los funcionarios" y evitar las "molestias" que pudieran derivarse de la presencia de ciudadanos que quisieran asistir al enlace desde el exterior del edificio municipal, según explicó ayer en rueda de prensa.
El exalcalde lamentó que su boda hubiera dejado de ser "un acontecimiento íntimo", aunque se mostró "tranquilo y contento" porque lo importante, dijo, es que la boda se celebraría dentro del Ayuntamiento, tal y como había anunciado.
Sobre el apoyo recibido desde su partido, el vicesecretario sectorial del PP valoró que es un respaldo "claro" y que todas las manifestaciones que ha escuchado por parte de los dirigentes populares "han sido de apoyo".
Para Maroto el recurso que el PP presentó en 2005 ante el Tribunal Constitucional contra la ley que permite el matrimonio homosexual "ya no es el debate de hoy" y se mostró convencido de que la sociedad española está "preparada para entender estas cuestiones".