madrid - Unas declaraciones del ministro de Defensa, Pedro Morenés, terminaron de caldear ayer la precampaña en Catalunya. A pocos días de que el jueves por la noche, en las horas previas a la Diada, se inicie oficialmente la campaña electoral, el ministro indicó ayer que las Fuerzas Armadas no tendrán ningún papel en relación con el proceso soberanista catalán “si todo el mundo cumple con su deber”. La lectura lógica que en territorio catalán se hizo de estas declaraciones es que se valora una posible actuación en caso de una declaración unilateral de independencia, la posibilidad sobre la que respondía Morenés. Las reacciones a este posicionamiento no se hicieron esperar y la mayor parte de grupos políticos, así como el Govern, arremetieron contra el mandatario hasta el punto de que el Gobierno y él mismo tuvieron que salir a explicar estas palabras.

Las declaraciones del ministro Morenés se produjeron en una entrevista concedida a RNE por la mañana. Preguntado por la actuación del Ejército ante una eventual declaración unilateral de independencia, el titular de Defensa dejó una hipotética actuación a expensas del comportamiento de los mandatarios catalanes. “Si todo el mundo cumple con su deber, le aseguro que no hará falta ningún tipo de actuación como la que usted está planteando”, señaló. Hace algo menos de un año, el propio ministro pronunció unas declaraciones similares aludiendo a que el Ejército es un “instrumento útil para el Gobierno” e indicó que “no están lejos los problemas y la inestabilidad”.

Las reacciones a las declaraciones del ministro llegaron desde el propio conseller de Presidencia de la Generalitat, Francesc Homs (CDC), quien las tildó de “incalificables” e “inclasificables”. “Estas declaraciones se contraponen con la democracia”, explicó, al tiempo que rogó que algún día salga algún ministro o el presidente a decir “que tomarán en consideración lo que vote el pueblo” de Catalunya en las elecciones del 27-S. El diputado de ERC en el Congreso Joan Tardà también salió al paso de estas declaraciones. “Es una vergüenza que una persona que teóricamente es culta y viajada diga estas sandeces, y además refleja su debilidad. Cuando amenazas y lo que haces es intentar amedrentar es que solamente te queda la estupidez”, indicó. Incluso la exministra de Defensa socialista, Carme Chacón, señaló que las Fuerzas Armadas no tienen “ningún interés en algo como lo que sugiere” el ministro de Defensa. La vicepresidenta española, Soraya Sáenz de Santamaría, matizó que “no hay ninguna perspectiva, ninguna previsión ni ninguna intención” de que las Fuerzas Armadas actúen.