madrid - El líder de Podemos, Pablo Iglesias, mantuvo ayer su primera reunión con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, en un contexto en el que los acuerdos para la constitución de los gobiernos autonómicos están aún en el aire, aunque ya han empezado las negociaciones en varios territorios. El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, anunció antes del encuentro que si Iglesias aboga por “la estabilidad y la reforma, y no por la ruptura”, ambas formaciones se pondrán entender a la hora de entablar acuerdos en ayuntamientos y comunidades autónomas.
La decisión ya acordada por la dirección de Podemos en relación a posibles pactos es no facilitar gobiernos del PP ni formarlos con el PSOE, si bien plantearán una serie de exigencias sobre regeneración, transparencia y rescate ciudadano para facilitar la investidura de los socialistas en las comunidades autónomas. El apoyo de Podemos, no obstante, puede ser clave para entregar el Gobierno al PSOE en Castilla-La Mancha, Aragón, Asturias, Extremadura, Comunidad Valenciana, Baleares, e incluso en Madrid si finalmente Ciudadanos no da su aval ni al PP ni al PSOE. La Comunidad Valenciana y Baleares tienen un escenario aún más diverso, ya que entran en juego otras formaciones como Compromìs o Més con un papel muy relevante de cara a la formación de sus respectivos gobiernos.
En todas estas comunidades los representantes de Podemos han comenzado ya a negociar y a mantener encuentros con los socialistas, todos con unas exigencias comunes de “limpieza democrática”, lucha contra la corrupción y búsqueda de soluciones para la situación de “emergencia social” que vive el país. Son los tres ejes que, según repetió ayer el secretario de Relaciones con la Sociedad Civil de Podemos, Rafael Mayoral, marcarán la posición del partido en las negociaciones.
La de ayer es la primera toma de contacto entre Iglesias y Sánchez y tiene lugar tras las dos breves conversaciones telefónicas que mantuvieron la semana pasada. Y en ese tiempo, no se han visto pero sí se han lanzado mensajes el uno al otro. El pasado sábado, Sánchez rechazaba que el PSOE tengan que dar un giro de 180 grados, como le ha exigido Iglesias, y, un día después, el líder de Podemos le advertía de que si no dan ese giro, con ellos no habrá acuerdo.
En cualquier caso, Podemos insiste en que la cita de ayer no cambia el escenario de momento, porque no esperaba que salieran de ella acuerdos, pero lo que sí representa es la entrada de Iglesias en la mesa de negociaciones en la que ya trabajan los líderes de todos los partidos. - Efe