MADRID - La revocación del permiso del Congreso al encuentro de víctimas de distinto signo fue criticada por buena parte de los partidos que realizaron la solicitud para que se pudiera celebrar. PNV apuntó a las “presiones” que ha recibido el presidente de la Cámara Baja, Jesús Posada, para echarse atrás: “Ha habido llamadas”, explicó. Amaiur contextualizó la decisión en una ofensiva del Gobierno del PP de cara a las elecciones del domingo y la Izquierda Plural cree que no hay argumentos para el veto.
El portavoz del Grupo del PNV, Aitor Esteban, consideró “lamentable” la decisión de la Mesa del Congreso y criticó que no se haya consultado con las fuerzas políticas que solicitaron la sala: la propia formación jeltzale, Amaiur, Geroa Bai, CiU, ERC y la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), además del socialista Odón Elorza. También mostró sus dudas de que revocar la autorización tenga argumentos jurídicos, y negó que en la primera edición se produjera alguna alteración del orden público o menosprecio a las víctimas del terrorismo. “Nadie ha sido capaz de concretar por qué el encuentro celebrado el año pasado sirvió para menospreciar a las víctimas, ni mucho menos. Los participantes quieren mantener un encuentro, un diálogo, y punto”.
Por su parte, Amaiur tampoco encontró “ninguna justificación” a la decisión de la Mesa y consideró “incomprensible” que se “niegue la palabra a determinadas víctimas que no cuentan con el apoyo del PP o no avalan su trayectoria política”. El diputado Iker Urbina enmarcó la decisión en una operación del Gobierno y del PP ante las elecciones del domingo, para “interferir en la voluntad” de los votantes vascos. “Están insistiendo en mirar al pasado”, afirmó, mezclando este hecho con las detenciones en Gasteiz de miembros de Segi, las de ayer por enaltecer el terrorismo en las redes sociales o la revisión de las condenas impuestas a veinte dirigentes de la ilegalizada Batasuna.
El portavoz adjunto de la Izquierda Plural, Joan Coscubiela, también se mostró disconforme con anular “sin muchos argumentos” la autorización, ya que la Cámara debería ser un “espacio plural” y porque considera que puede contribuir al “imprescindible proceso de reconciliación” que ha de haber en Euskadi. - DNA
