Iruñea - El Gobierno de Nafarroa entregó ayer a Jesús Huarte Beaumont, hijo de Félix Huarte, y a María Urmeneta Ochoa, hija de Miguel Javier Urmeneta, la Medalla de Oro que más “debate social” ha generado en sus tres décadas de historia, reconoció la presidenta de la comunidad, Yolanda Barcina. Calificó este debate social de “intenso” por “la irreflexiva reacción de algunos”, declaró, sin concretar quién. Aunque, entre ellos, culpabilizó a cinco de los siete grupos políticos que componen el Parlamento foral, PSN, Bildu, Aralar, I-E y Geroa Bai, que representan a parte de la ciudadanía navarra, ya que aprobaron una declaración institucional contra la entrega de esta Medalla a Huarte y Urmeneta, al estar enmarcada su trayectoria en el régimen franquista.
Barcina se reafirmó en la decisión adoptada por el Ejecutivo foral porque “hay sobrados motivos de sentirse orgullosos, muy, muy orgullosos -repitió dos veces este adverbio sin estar escrito en el discurso- de Félix y Miguel Javier” por su “visión para distribuir la expansión industrial por todo el territorio de Navarra, por unir al sector privado con el público y por su generosidad”.
La presidenta, ante los familiares de Huarte y Urmeneta, siguió insistiéndoles en que tienen que decir a sus hijos, nietos y a quienes tomen el relevo en sus familias que “una abrumadora mayoría de navarros estarán eternamente agradecidos de lo que hicieron por Navarra”. De esta forma, Barcina quería acallar las críticas que durante estas tres semanas se han escuchado por realizar este reconocimiento al constructor, industrial y político Félix Huarte y al abogado, militar, alcalde, diputado y director de la Caja de Ahorros Municipal, Miguel Javier Urmeneta.
La mayoría del Parlamento foral ya manifestó que esta medalla debía “estar vinculada a personas que representen los valores democráticos y acordes con el sentir de la actual sociedad navarra”. Ningún representante de Bildu, I-E y Geroa Bai acudió al acto en el claustro isabelino. Sin embargo, sí que se pudieron ver representantes de los otros dos partidos que manifestaron su repulsa a la entrega de esta Medalla, como a Roberto Jiménez y Juan José Lizarbe, del PSN, y a Patxi Zabaleta, de Aralar.
“Creo que el disgusto inicial que pudisteis sentir los familiares se ha visto paliado con creces ante la sucesión de testimonios de personas de todas las sensibilidades que han puesto las cosas en su sitio”, reiteró Barcina, , que omitió hacer balance de sus cuatro años al frente de un Ejecutivo debilitado por la minoría en la que gobierna, y se limitó a hablar del desempleo y de la necesidad de un consenso entre las fuerzas políticas.