BILBAO. La movilización se desarrollará a las doce y media del mediodía desde la Alameda de Ondarroa bajo el lema 'Giza eskubideak. Konponbidea. Bakea. Gaixo dauden presoak etxera!' ('Derechos humanos. Solución. Los presos enfermos, a casa').

La marcha ha sido presentada este martes en Bilbao por una quincena de personas, según han explicado, "ciudadanos de diferentes sectores de la sociedad preocupados por la situación de los presos que están graves". En su nombre, han dado lectura a un comunicado llamando a participar en la movilización Martínez de Lagos y Arantzamendi, en castellano y euskera.

En la comparecencia, han denunciado la situación de los reclusos Ibon Iparragirre, Inma Berriozabal, Josemi Etxeandia, Txus Martín, Aitzol Gogorza, Ibon Fernández Iragi, Gari Arruarte, José Ramón López de Abetxuko, Ventura Tomé, Iñaki Etxabarria y Josetxo Arizkuren, que soportan "situaciones críticas" y "una total conculcación de los derechos humanos".

Tras criticar que la política penitenciaria "busca el sufrimiento gratuito", han subrayado que la sociedad vasca "quiere cerrar la puerta al sufrimiento y abrir la ventana de la solución, como viene demostrando de diferentes maneras". Por el contrario, han lamentado, los gobiernos español y francés "no dan sino pasos en sentido contrario".

En esta línea, han señalado que la ciudadanía vasca desea ser "una sociedad que mira con esperanza al futuro", para lo que "todos juntos debemos llegar a una solución consensuada que contemple en su seno el asunto de las personas exiliadas y presas". "Porque todos le debemos una oportunidad a un escenario de paz", han insistido.

En este marco, han solicitado la libertad "inmediata" de los presos que padecen enfermedades graves y, "sin demora, mientras se aplica esta exigencia, el acercarles a una prisión próxima a su lugar de origen".

Según han asegurado, "todas estas personas son mantenidas presas conculcando, además de las leyes vigentes, todos los derechos de la dignidad humana, actuando en contra de su moral e integridad física, y recibiendo trato inhumano". Además, han criticado la situación de sus familiares y allegados.