vitoria - Hace cuatro años seis de cada diez votantes se quedaron en casa y todos los indicadores prevén que en las elecciones europeas del próximo día 25 esta cifra podría aumentar. ¿Hasta cuánto? Si en 2009 solo se acercó a los colegios electorales el 41,23% de los votantes en Euskadi (el 44,9% en el Estado), en esta ocasión se teme que la participación no llegue al 40%. Con cada cita electoral se confirma que los ciudadanos siguen viendo la Unión Europea como un ente lejano e incluso ajeno, a tenor de la cada vez menor participación electoral. Pero la desafección política generada tras cinco años de profunda crisis económica, en la que mucho han tenido que ver las políticas europeas, ha hecho crecer aún más si cabe la desconfianza ciudadana, sobre todo en las grandes formaciones políticas españolas, el PP y el PSOE, que se han sucedido en el gobierno en estos años. Conscientes de esta realidad, los partidos tratan de movilizar de cara al 25-M a los propios, a su electorado tradicional, a esa bolsa de voto fiel que hace ganar elecciones a unos y a otros proporciona una representación digna.

En Euskadi tradicionalmente el equilibrio de fuerzas y las circunstancias políticas son completamente diferentes. De hecho, en 2009 el PNV ganó con 208.432 votos, seguido del PSE (202.885); el PP se situó como tercera fuerza, aunque ganó en el conjunto del Estado español (117.057); y, por detrás, la candidatura de Iniciativa Internacionalista, que recogió el voto abertzale radical tras la ilegalización de Batasuna (116.827), y la coalición de Aralar y EA (41.140 votos). Con todo, la desafección de los ciudadanos sumada a la aparición de nuevas formaciones surgidas al calor de los movimientos del 15-M y que buscan los votos de los descontentos con las políticas económicas también han puesto en guardia a los partidos vascos.

El coordinador de campaña del PNV, Joseba Aurrekoetxea, reconoce la importancia de "activar" el electorado para mantener el nivel de voto de hace cuatro años. "Todo lo que se consiga a partir de ahí es bueno". Para lograr esta meta, la estrategia de los jeltzales pasa por "tratar de convencer al electorado de la importancia de estas elecciones" y de que la eurodiputada y candidata a la elección, Izaskun Bilbao, "esté en Bruselas" para que pueda seguir desarrollando su labor, "importantísima para Euskadi, como se ha demostrado en los últimos cuatro años", resalta el responsable de Organización del Euzkadi Buru Batzar.

derecho a decidir Con este objetivo en mente y bajo el paraguas del lema de campaña Más Euskadi, más Europa, la oferta electoral del PNV pasa por incidir en la austeridad como única receta, la apuesta por la "economía productiva" para responder al desempleo, y la defensa del modelo social europeo centrado en "rescatar a las personas" de los efectos de la crisis. También hace una "apuesta radical" por el federalismo europeo, la democracia y la participación ciudadana como instrumento para resolver el encaje de todas las identidades nacionales en Europa". Como sostiene Aurrekoetxea, la reivindicación al derecho a decidir "va estar presente mientras no se atiendan las realidades nacionales que conforman el Estado español y Europa". Es precisamente sobre esta reivindicación, sobre el derecho a decidir, alrededor del que gira la campaña electoral de EH Bildu, cuyo lema para esta cita -Sí al derecho a decidir, diseñado más en clave interna que mirando a Bruselas-, no deja lugar a dudas. La coalición que presenta a Josu Juaristi como reclamo electoral sitúa estas elecciones en un "contexto marcado por la crisis y las nefastas políticas que se aplican para hacerle frente" y también condicionado por los procesos de Escocia y Catalunya, por lo que sostiene que "es la única fuerza que defenderá sin ambigüedades la creación de un Estado vasco en Europa".

No obstante, desde la coalición se reconoce el reto al que se enfrenta de cara a un sector determinado de la población, que "puede tender a la abstención debido a las políticas de la troika europea, y de las élites europeas y locales", aseguran desde el entorno de Juaristi.

La formación que lidera Alfredo Pérez Rubalcaba también es consciente de que tiene un verdadero problema con la abstención, ya que históricamente el PSOE gana elecciones si hay un alto índice de participación, que no parece que vaya a ser el caso. Tú mueves Europa es el lema elegido por los socialistas para tratar de llevar a las urnas a los simpatizantes descontentos que han dejado de votar PSOE tras el fracaso de las políticas del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, reto nada fácil debido a que los problemas ideológicos y de liderazgo que arrastra desde entonces no parecen encauzados. Los socialistas miran de reojo a IU y a UPyD, por donde pueden seguir sufriendo una hemorragia de votos, e incluso a los nuevos partidos más a la izquierda, "extremismos que no van a construir Europa", como ha alertado Ramón Jáuregui.

Lejos de hacer autocrítica de su paso por La Moncloa, el PSOE fiará su futuro a que el electorado compre su oferta de que una mayoría socialdemócrata en Bruselas frenará a la derecha en Europa, lo que ayudará a acabar con el "austericidio", y supondría inaugurar una nueva tendencia electoral en España que desaloje a Mariano Rajoy en las elecciones generales de 2015.

Voto fiel del pp Pese a que el electorado del Partido Popular tiene fama de ser fiel en cada cita electoral y que da el triunfo a la formación conservadora salvo que los socialistas logren una alta participación que les permita el vuelco electoral, Rajoy sabe que las circunstancias pueden desmontar este mito. Por eso ha emplazado a su partido a movilizar a los suyos, lo suficiente para asegurarle volver a ganar las elecciones, como lo hizo en las anteriores europeas de 2009, cuando aún gobernaba Rodríguez Zapatero, y confirmó con su mayoría absoluta de 2011.

El lema popular para estas elecciones, Lo que está en juego es el futuro, ya adelanta los argumentos que utilizará la formación de Génova en campaña. A saber, que el PP ha logrado dar la vuelta a la situación económica del país y que ha logrado un principio de crecimiento económico para este año y el siguiente. También volverá a sacar a la palestra el espantajo de Zapatero porque, pese a los dos años de Gobierno de Rajoy, el PP incidirá en que recibieron "la peor herencia en democracia".

Los populares trabajarán también en Euskadi por que los votantes sean conscientes de la importancia de participar en los comicios, porque "decidirán quién va a tener peso en Europa", cuyas políticas económicas, de empleo o infraestructuras tienen "una gran importancia para el día a día de los vascos", sostiene la secretaria general del PP en la CAV, Nerea Llanos. Los populares vascos no dejarán pasar la oportunidad de arremeter contra los procesos soberanistas, ya que, incide Llanos, Euskadi y Catalunya "solo caben en Europa formando parte de España".

Pese a ser un partido minoritario en Euskadi, las buenas perspectivas electorales que dan las encuestas a UPyD en el conjunto del Estado obligarán a la formación en el País Vasco a "responder a la expectación generada y hablar de lo que toca, de la Unión Europea", explica Nico Gutiérrez, responsable de Expansión de la filial vasca de la formación magenta.