Pamplona. Cinco días después de justificar en el Parlamento sus palabras en la televisión ultraconservadora 13 TV reconociendo que el impulso del Gobierno a la enseñanza en inglés buscaba frenar el número de matriculaciones en el modelo D, Yolanda Barcina volvía ayer a Madrid y, como es habitual en los últimos tiempos, dejaba un buen puñado de titulares. Desde que el Tribunal Supremo diese carpetazo al caso Can el pasado verano, la presidenta foral ha multiplicado sus viajes a la capital de España. Barcina aprovecha estas escapadas para alimentar el mensaje del miedo al cambio en Navarra.

La presidenta no disimula desde luego este objetivo y por momentos incluso da la impresión de que olvida que Intereconomía o 13 TV también se pueden captar en Navarra. El pasado 16 de septiembre se pudo ver a Barcina en el programa El gato al agua de Intereconomía. Entonces, el principal titular que el propio programa utilizó como rotulación en pantalla fue: "Ferraz no permitió un Gobierno PSN-Geroa Bai".

Unas semanas después, Barcina fue una de las presidentas autonómicas que asistió en Madrid al desfile militar por el Día de la Hispanidad. El día 27 de ese mismo mes se vería a Barcina en la manifestación de algunas asociaciones de víctimas del terrorismo en la plaza de Colón. El próximo día en el se que supo de la visita de Barcina a Madrid fue el 18 de noviembre, con motivo del juicio por los tartazos. Entonces, la presidenta aprovecharía para participar en Los desayunos de TVE, cuando mencionó ese dogma de UPN de que la izquierda abertzale busca "arruinar" Navarra y unirla a la CAV. Su penúltima visita a Madrid fue al plató de El Cascabel, de 13 TV, donde de nuevo se vio a la presidenta muy cómoda ante un grupo de contertulios que desde luego no buscaron ponerle en apuros.