MADRID. El cabecilla de la trama Gürtel, Francisco Correa, organizó en el año 2002 una cacería para 52 invitados entre dirigentes políticos y empresarios, junto a sus respectivas esposas, que supuso un coste total de 62.719 euros. Según un listado provisional de invitados a la cacería difundido ayer por la Cadena Ser, en la misma habrían participado Eduardo Zaplana, Luis Bárcenas, Alejandro Agag y Miguel Blesa. Este medio informó de que la empresa de Correa, Special Events, organizó el evento para una conocida marca de vehículos todoterreno entre el 14 y el 16 de febrero de 2002 en la finca El Gargantón de Ciudad Real, un exclusivo coto privado de 6.000 hectáreas y diez manchas de montería.

Citando las cajas inéditas del sumario del caso Gürtel que obran en poder del juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, la Ser aseguró que en total asistieron 27 invitados con sus esposas, que tuvieron "un trato especial". Una vez en la finca donde tuvo lugar la montería, les esperaban cuatro azafatas, aperitivo y cena, un espectáculo de variedades y flamenco, torneos de mus y regalos a cargo de la Gürtel: un zurrón de piel típico de Ciudad Real para ellos, valorado en unos 155 euros; y flores para ellas a 469,68 euros el ramo según factura. Los puros y el tabaco, con un coste de 638 euros, también eran gratuitos para los invitados.

La Ser agregó que la caza estaba reservada a los caballeros. Tras el desayuno montero en la finca eran conducidos a sus puestos donde podían abatir "jabalíes sin cupo", es decir, un número ilimitado, además de "dos ciervas y un venado grande" cada uno. En la documentación del sumario también figuran la hoja de gastos y la factura final enviada por Special Events a la empresa automovilística, 62.719 euros por el fin de semana.

Móvil de lujo Fuentes consultadas por la Ser confirmaron que el expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa, gran aficionado a la caza, acudió a la montería, pese a lo que ayer no quiso ofrecer su versión de los hechos. Alejandro Agag o Eduardo Zaplana negaron a la emisora haber estado en la cacería, y el exministro de Trabajo alegó que ese fin de semana viajó al extranjero.

Ayer también trascendió que la hija de José María Aznar, Ana Aznar, fue una de las beneficiadas por los lujosos obsequios de la trama Gürtel, ya que recibió un móvil valorado en 1.250 euros en la Navidad de 2002. Se lo regaló una de las empresas clave de la presunta red corrupta, cuatro meses después de organizar su multitudinaria boda con Alejandro Agag en El Escorial y coincidiendo con el momento álgido de la trama.

El teléfono no fue el único obsequio del que disfrutó la hija de Aznar, ya que Gürtel se hizo cargo de parte de gastos de su boda como los más de 30.000 euros en iluminación que Ana Botella, la actual alcaldesa de Madrid, acabó considerando un "regalo". El teléfono fue comprado por el hombre de confianza de Correa, Álvaro Pérez, conocido como el bigotes.