Bilbao. El secretario general del PP en la CAV, Iñaki Oyarzábal, pidió ayer que "todos" respalden las decisiones judiciales, "aunque no gusten y aunque duelan", defendió la independencia de los tribunales, y trasladó a las víctimas que, con sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos o sin ella, la Justicia española "ganará la batalla" al terrorismo. En una entrevista a Radio Euskadi, Oyarzábal afirmó que no comparte las críticas al Tribunal Supremo, "por lo menos", en los términos en las que las está realizando la AVT.
De esta forma, se refirió al hecho de que la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ángeles Pedraza, haya pedido al Gobierno español que elimine el Supremo tras la decisión del alto tribunal de avalar que la Audiencia Nacional y las audiencias provinciales revisen la sentencia de Estrasburgo que anula la aplicación retroactiva de la doctrina Parot.
A su juicio, hay que solidarizarse "con el dolor de la víctimas y estar a su lado", pero afirmó que, aunque su partido pueda entender "su enfado", no siempre debe "compartir sus posiciones". Por ello, defendió la independencia de los jueces y mostró su convencimiento de que, "con sentencias o sin sentencias, la democracia española, el Estado de Derecho y la Justicia vencerán al terrorismo".
Iñaki Oyarzábal se refirió, en concreto, al magistrado Fernando Grande-Marlaska, "que ha mostrado tanta valentía en la lucha contra el terrorismo y que ahora no puede perder su crédito porque esté respondiendo a una decisión judicial europea que, por mucho que no guste, la obligación de los jueces en España es cumplirla", incluso aunque al PP se le pueda acusar de "ceder ante ETA de traicionar la memoria de la víctimas". "Los miembros del PP en el País Vasco, llevamos muchos años ya soportando que nos insulten, que nos llamen de todo, que nos llamen asesinos los batasunos. Los radicales nos han llamado también fascistas, franquistas, de todo, y algunos ahora también en Madrid nos llaman de todo", añadió.
En este sentido, apuntó que no hay que dejarse "llevar ni condicionar por los extremos, por los exaltados o los fanatismos. "Tenemos que defender aquello en lo que creemos y yo creo en la posición del PP, dando aquí la batalla a los fanáticos durante tantos años, y también ahora, en circunstancias difíciles, el PP debe defender una posición centrada y sensata en defensa del Estado de Derecho", zanjó.