vitoria. Cerca del 80% de la normativa europea es de aplicación directa en los estados que componen la unión. En ese contexto, las regiones o entes subestatales apuestan cada vez más por contar con una voz en las instituciones de la Unión Europea para influir en la toma de decisiones y poder introducir sus demandas en la tramitación de esas normas. Esa reivindicación, junto al principio europeo de subsidiariedad, que defiende que cada competencia la ejerza la institución más próxima al ciudadano en la medida en que sea posible, dan cuerpo a la apuesta del PNV por consolidar Euskadi como una nación en Europa, un debate que podrán abordar los partidos en el Parlamento Vasco este mismo otoño, y que volvió a poner ayer sobre la mesa el lehendakari. Durante el discurso inaugural del Congreso Internacional Europa después de la crisis del euro: legitimidad, democracia y justicia, Iñigo Urkullu avisó de que "el reto del autogobierno hoy está en la capacidad de participar en procesos complejos de actuación y decisión", y situó el "gran desafío" de la nación vasca en encontrar nuevas formas de organización política capaces de superar las estructuras "rígidas" en que se han asentado las realidades estatales.

El máximo representante de la CAV señaló dos planos: por una parte, de puertas afuera, dejó ver que a Euskadi le interesaría participar en la toma de decisiones a nivel internacional para hacer valer sus propuestas y, por otra, de puertas adentro, las instituciones vascas y otras entidades subestatales podrían poner en valor sus competencias para ser ellas las que ejerzan ciertas funciones poniendo en valor su mayor proximidad al ciudadano. De hecho, opinó que Europa debe centrarse en dar respuesta a las necesidades ciudadanas desde el principio de subsidiariedad y gobernanza multinivel, y defendió la diversidad de los pueblos y culturas que conforman el continente. "Creo que esta Europa, desde estos principios, va a resolver de forma más eficaz los intereses de los ciudadanos", analizó.

En cuanto a la participación de Euskadi en la UE, el Gobierno vasco reclamaba recientemente ante el Comité de Regiones una interlocución directa con la Comisión Europea en los ámbitos que afectaran a sus competencias, ante las limitaciones con las que estarían topándose las instituciones subestatales en la defensa de sus intereses.

El lehendakari llegó a recordar las palabras del lehendakari José Antonio Aguirre para apoyar su tesis. "Creo en la Europa que imaginaba el lehendakari en 1949 cuando afirmaba que la filosofía política que se orienta al futuro quiere consagrar la libertad nacional de los pueblos haciéndola compatible con la participación en espacios socio-políticos más amplios. La garantía de los pueblos, especialmente los más pequeños, reside en las amplias estructuras supraestatales", expuso.

crisis económica Urkullu, que apuesta por instaurar una relación bilateral, en pie de igualdad, entre el Estado y Euskadi, ofreció su discurso en presencia del portavoz de la Diputación de Bizkaia, Unai Rementeria; el consejero delegado de la Alcaldía de Bilbao, Andoni Aldekoa; el rector de la UPV/EHU, Iñaki Goirizelaia; el presidente de Kutxabank, Mario Fernández; y el director de Globernance, Daniel Innerarity, organizador del foro de debate que volverá a acoger hoy el Bizkaia Aretoa de Bilbao.

En su alocución, también opinó que las carencias del euro han quedado en evidencia durante la crisis, y lamentó que la moneda única haya funcionado hasta la fecha sin el sostén de una política común. A su juicio, solo los mensajes tranquilizadores del Banco Central Europeo han podido contener la catástrofe, aunque esa componenda resultaría insuficiente a medio y largo plazo. Por ello, volvió a apostar por la unión bancaria y la convergencia en materia fiscal y económica.