la propuesta de acuerdo del gobierno vasco

El Ejecutivo confía a Ortuzar el desbloqueo del pacto de estabilidad

El PNV seguirá llevando las riendas de las negociaciones sobre fiscalidad

M. Vázquez

Bilbao. En su propósito de procurarse la estabilidad parlamentaria de la mano de socialistas y populares, el PNV buscará acuerdos sobre fiscalidad, políticas públicas, empleo y adelgazamiento de la Administración, cuatro debates que le exigirán habilitar dos vías paralelas en la negociación. Por una parte, el Gobierno Vasco liderará las conversaciones sobre políticas sociales, lucha contra el paro y redimensionamiento de las instituciones y, por otra, el partido será el encargado de seguir exprimiendo la negociación fiscal, ya que el Ejecutivo carece de competencias en la materia. Sabin Etxea, además, no partirá de cero en ese terreno, ya que comenzó a negociar sobre impuestos con el socialismo a la altura de enero, de modo que la decisión de Lakua no solo serviría al lehendakari para respetar las competencias, sino que pondría en valor el trabajo ya realizado por el partido.

Teniendo en cuenta que el debate fiscal es estratégico y toca nervio en el PSE, un acuerdo en ese ámbito podría desatascar las negociaciones en las otras tres áreas, donde cabría suponer, además, una menor divergencia entre jeltzales y socialistas. Por ello, y al depositar esa negociación en el partido, en la práctica será el presidente del EBB Andoni Ortuzar quien llevará el peso de las conversaciones para dotar de estabilidad al Gobierno Vasco. El jeltzale ya lideró el arranque de las conversaciones fiscales con el socialismo, aunque el PNV se encuentra a la espera de que Patxi López responda al documento que le hizo llegar antes de Semana Santa.

Por el momento, no se ha fijado fecha alguna para las conversaciones entre jeltzales, socialistas y populares, pero ese dato tampoco obceca al Gobierno, que prefiere llevar con calma las negociaciones y estudiar los posibles acuerdos con detenimiento. A su favor juega el calendario ya que, según las fuentes consultadas, aunque el Ejecutivo deba presentar las directrices técnicas del proyecto presupuestario de 2014 en junio, ese documento no exige demasiada precisión ni cifras concretas, de modo que Lakua no necesitaría conocer los términos de la reforma fiscal para adecuar los parámetros presupuestarios a la eventual recaudación derivada de esas nuevas normas impositivas.

Plazos Las conversaciones sobre las Cuentas arrancarán a finales de septiembre o principios de octubre, mes en el que, además, se citará el Consejo Vasco de Finanzas. Será en ese cónclave cuando se pongan sobre la mesa las cifras sobre recaudación, y será en ese momento cuando el PNV deba redoblar esfuerzos para cerrar la reforma de la fiscalidad.

Rodolfo Ares apuntó ayer la apuesta del PSE por llevar el debate impositivo al Parlamento, una cuestión que podría plantear en la negociación, y que podría atascar los acuerdos. En cualquier caso, desde el PNV recuerdan que ese traslado de competencias desde las Juntas Generales exigiría modificar el Estatuto y la Constitución, algo "no demasiado viable", al menos a corto plazo.

Andoni Ortuzar, en una comparecencia anterior. Foto:oskar martínez

Lakua negociará con PSE y PP sobre empleo, políticas públicas

y adelgazamiento

de la Administración

Sabin Etxea liderará el pacto sobre el cuarto eje, la fiscalidad, al carecer el Gobierno Vasco de competencias en el área