madrid. El debate sobre las primarias en el PSOE, azuzado por la candidatura no confirmada de Eduardo Madina, por el dejarse querer de Carme Chacón y por la posibilidad cada vez más creíble de que Patxi López opte también por liderar las listas socialistas en España, está haciendo daño a Alfredo Pérez Rubalcaba. Lejos de cerrar la polémica con un "ahora no toca", la insistencia de los medios y las posiciones ambiguas de los protagonistas, amén del desafío abierto que los socialistas gallegos han planteado a la Ejecutiva Federal (irán a primarias cuando y como el PSdG decida), permiten a los rivales políticos de Rubalcaba mofarse de su liderazgo. Ayer volvió a verse en el Congreso de los Diputados cuando ante una intervención del portavoz socialista, un diputado popular le espetó: "¡Que venga (Eduardo) Madina ya!".
Aún hay tiempo Ante una debilidad tan manifiesta, unida a la eterna cantinela en la que los populares basan la defensa de sus medidas económicas ("la crisis es heredada"), el sector crítico sigue moviéndose. Ayer le tocó el turno a la diputada del PSOE Carme Chacón quien a preguntas de los periodistas recordó que en el pasado aseguró que se daba a sí misma un tiempo para pensar si optaba al liderazgo del PSOE y ha afirmado que ese plazo aún no ha finalizado. "Ya dije que me daba un tiempo para pensarlo y el tiempo sigue ahí", contestó directa Chacón en un desayuno de prensa organizado por Nueva Economía Fórum.
Sobre la posibilidad de que el secretario general del grupo socialista del Congreso, Eduardo Madina, se presente a unas primarias para optar a liderar su partido, Chacón respondía que Madina es una persona a la que aprecia "muchísimo" y que le parece "positivo" el supuesto de que concurra a las primarias.
Valencia Pero es que a Rubalcaba parecen crecerle los enanos por todas partes. Ayer el Partido de los Socialistas Valencianos (PSPV) anunció que aprobará el próximo sábado un documento en el que propone elegir al secretario general mediante primarias entre los militantes. Además, ese texto plantea que se modifique la Ley de Partidos Políticos para que los candidatos de todos los partidos se elijan por un sistema de primarias abiertas a todos los ciudadanos. En otras palabras, supone que los socialistas valencianos se sitúan con las tesis de sus compañeros gallegos y frente a los postulados que intenta imponer la Ejecutiva Federal ("no es tiempo de hablar de primarias"). En el documento que aprobará el sábado, el PSPV defiende modificar los estatutos del PSOE para que el secretario general del partido (y de sus federaciones) lo puedan elegir los militantes directamente y no a través de delegados. Además, otra de las propuestas que incluyen en su documento, la de facilitar lo referéndum sobre temas importantes en todos los niveles territoriales del Estado, también supone un apoyo a sus compañeros catalanes, que defienden realizar una consulta sobre la independencia de Catalunya, aunque sea para votar en contra.