barcelona. El hasta hace poco secretario general de CDC e imputado por presunto tráfico de influencias, Oriol Pujol, escribió en noviembre de 2011 un mensaje al móvil de su amigo y empresario Sergio Alsina diciéndole: "Yo soy presidente del grupo parlamentario (de CiU), o sea, que puedo hacer lo que creas de cara a Yamaha". Este mensaje de texto forma parte de los contactos entre el hijo del expresidente de Generalitat, Jordi Pujol, y el empresario, también imputado, que recoge un informe de Hacienda incluido en el sumario del caso de las ITV (adjudicaciones irregulares de estos servicios a cambio de comisiones) en Cataluña.

Oriol Pujol y Sergi Alsina mantienen una gran amistad, son vecinos en Urús (Girona) donde tienen segundas residencias y compran vehículos conjuntamente; pero además, la esposa del político, Ana Vidal, es junto al empresario administradora de la consultora Alta Partners. Esta empresa ha asesorado a importantes firmas en varias reconversiones industriales percibiendo de la operación Yamaha-Grupo Sese, por ejemplo, 1.876.000 euros; en la Sharp-Ficosa 2.360.000 euros, y en Sharp-Cirsa 2.737.600 euros, según recoge el mismo informe de la Agencia Tributaria. "Sergi Alsina Jiménez mantiene informado a Oriol Pujol sobre la evolución de algunas prestaciones de servicios que están realizado con su empresa consultora Alta Partners y le solicita gestiones a nivel político", sostiene Hacienda.

Así se lo pide también en la operación Sharp-Cirsa: "Si ven que el Govern claramente muestra su voluntad de apoyar esta opción, podemos intentar negociar un mejor acuerdo", le escribe en un mensaje de texto el 17 de enero de 2011. Pujol deberá dar explicaciones de todo ello el próximo martes 16 de abril ante el TSJ de Catalunya.