madrid. El apoyo a la continuidad del chavismo en Venezuela divide a Latinoamérica tanto como lo hace en ese país, una polarización que no se detecta con la misma intensidad en Brasil y México, según un estudio divulgado ayer en Madrid. La continuidad del chavismo tras la reciente muerte del presidente Hugo Chávez cuenta con el apoyo "intenso y global" de Bolivia, Cuba, Ecuador y Nicaragua, de acuerdo al informe elaborado por Instituto de Prospectiva Internacional (IPI).
El rechazo, por el contrario, procede de "manera generalizada" del tejido empresarial, los medios de comunicación y las presidencias de Chile, Colombia, Guatemala, Haití, Panamá y Paraguay, agrega.
El estudio, realizado en puertas de las elecciones presidenciales de Venezuela del 14 de abril, también concluye que la ciudadanía latinoamericana, "en términos globales", "no apoya la continuidad" del chavismo. La "mayoría de los presidentes de la región apoyan la continuidad" del gobierno chavista en Venezuela, según el informe, que destaca que "secundan intensamente" esa opción Argentina, Bolivia, Cuba, Ecuador, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Uruguay, mientras que Brasil y Costa Rica lo hacen con "menos intensidad".
Por contra, "rechazan la continuidad del chavismo claramente" los presidentes de Chile, Colombia, Guatemala, Haití, Panamá y Paraguay, mientras que México, Costa Rica y Perú se muestran "neutrales", de acuerdo a la investigación. Los principales partidos en la oposición distribuyen su apoyo de manera inversa a los presidentes, salvo en Bolivia, Costa Rica, Cuba y Honduras, en los que los grupos opositores también respaldan al gobierno bolivariano. Los medios de comunicación latinoamericanos, según el informe, "son los principales críticos con el movimiento chavista" en la región y, salvo los de Bolivia, Cuba, Ecuador, Honduras, Nicaragua y Uruguay, "rechazan" la continuidad.