madrid. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, fue el ganador del Debate sobre el estado de la Nación al imponerse sobre el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, por 26,9 puntos de diferencia, según la encuesta telefónica realizada por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
En concreto, el 34,6% de los ciudadanos encuestados que lo siguieron cree que ganó Rajoy, frente al 7,7% que adjudica la victoria a Rubalcaba. Eso sí, 39,1% de los entrevistados, el porcentaje más alto, cree que no ganó ninguno. El coordinador general de IU, Cayo Lara, con un 2,8% y la líder de UPyD, Rosa Díez, con 2,3%, son los siguientes en la lista de ganadores.
Según los datos recogidos por el CIS en función del recuerdo de voto en elecciones generales de 2011, el 71,3% de los votantes del PP encuestados creen que ganó Rajoy, mientras que son un 16,1% los votantes socialistas que opinan que la victoria en el cara a cara fue para Rubalcaba.
Rajoy también fue el vencedor de la última edición del Debate sobre el estado de la Nación, celebrado en 2011, cuando todavía era líder de la oposición.
Aquella fue también la primera vez que los encuestados del CIS dieron la victoria al presidente del PP, imponiéndose así, en esta ocasión por 8,5 puntos, a un José Luis Rodríguez Zapatero que no había perdido ninguna de sus cinco citas como presidente (su última derrota había sido en 2003 frente a Aznar).
En lo que se refiere a la valoración general que hacen los ciudadanos de las intervenciones de los portavoces, la líder de UPyD ha resultado ser la mejor valorada, pues el 32,1% de los encuestados considera que estuvo "bastante" o "muy bien".
Le sigue el presidente del Gobierno con un porcentaje del 30%, Cayo Lara con el 24,7%, Rubalcaba con el 11,3% y el portavoz de CiU, Josep Antoni Durán i Lleida con el 10,7%.
falta de realismo Por otra parte, casi el 66% de los ciudadanos encuestados considera que Rajoy no demostró durante su primer examen como presidente tener sensibilidad hacia los problemas de los españoles, y casi el 65% cree que no fue realista.
Asimismo, siete de cada diez españoles opina que no tiene capacidad para comunicarse con la ciudadanía. En cuanto al líder de la oposición, casi el 60% cree que tampoco fue realista y el 63,2% considera asimismo que no demostró tener iniciativa política, aunque son más (un 50,5%) los que creen que tiene sensibilidad hacia los problemas del país frente a los que creen que no la tiene (45%).
En este sentido, siete de cada diez de los encuestados (un 72%) cree que en el debate se trataron poco o nada los temas que "realmente preocupan hoy a los españoles". Además, el 86,2% opina que en las intervenciones predominaron "las críticas, los reproches y las acusaciones entre unos y otros", frente al 9% que cree que se habló de propuestas para solucionar los problemas del país.
El tema que más se trató durante el debate fue, según tres de cada diez ciudadanos (26,9%), la crisis económica, seguido de la corrupción (25,7%) y el desempleo (12,7%).
La encuesta de este año se basa en 1.600 entrevistas telefónicas realizadas a ciudadanos de 685 municipios de toda España entre las 13.00 horas del 21 de febrero --una vez finalizaron sus intervenciones todos los portavoces-- y las 22.00 horas del 22 de febrero.
De esos 1.600 ciudadanos encuestados, el 73,9% tenían conocimiento de que se había celebrado el Debate, mientras que el 26,1% declaró que no lo sabía. Asimismo, el 57% cree que estos debates son poco o nada interesantes, frente al 40,2 que se muestran muy o bastante interesado.
Se trata de un estudio que, al referirse a un asunto muy concreto y por razones de urgencia, se basa en unas encuestas telefónicas en lugar de las 2.500 entrevistas personales que se utilizan habitualmente para los Barómetros de Opinión.
En este sentido, y celebrando la victoria en el debate anunciada en las encuestas, el vicesecretario de Política Autonómica y Local del PP, Javier Arenas, señaló que tras el Debate sobre el Estado de la Nación se ha abierto "una segunda etapa" en la legislatura, con un Gobierno central "más fuerte y una oposición más débil".