madrid. La Coordinadora 25-S, organizadora de la iniciativa Rodea el Congreso, ha vuelto a convocar una nueva concentración de las mismas características que la que acabó el pasado día 25 con duras cargas policiales en el centro de Madrid. El llamamiento es para el próximo día 23 de octubre a partir de las 19.00 horas, en esta ocasión, para protestar contra los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2013 que los diputados comenzarán a debatir ese mismo día. En concreto, la coordinadora llama a la ciudadanía a rodear la Cámara Baja "de manera literal y metafórica, de forma no violenta y con inteligencia". La justificación de la convocatoria es el debate de unas Cuentas para el año que viene que son "las más injustas e irreales de las últimas décadas".
Según denunciaba el colectivo, "uno de cada cuatro euros estará destinado a pagar los intereses" de una deuda que consideran "ilegítima", al tiempo que lamentan que su debate y votación en el Congreso representa un "acto ritual y vacío". "Será nuestra aportación al monólogo que tendrá lugar en el interior del edificio", señalan, para añadir que su intención es terminar la protesta "cuando sus señorías abandonen el hemiciclo después de cumplir con su parte del paripé".
La del día 23 no es la única acción que han convocado los indignados para protestar contra los Presupuestos. Así, el día 19 de octubre tienen la intención de registrar en el Congreso un documento "de rechazo rotundo" a las cuentas y el 25 tienen previsto celebrar una jornada "de lucha descentralizada y desobediencia civil" que se irá concretando los próximos días.
Además, la Coordinadora ha convocado una manifestación estatal para el día 27, que en Madrid saldrá desde plaza de España y que, tras pasar por Callao y Cibeles, terminará de nuevo en Neptuno (plaza de Cánovas del Castillo), en los alrededores del Congreso. La Coordinadora ya anunció que, a pesar de que las protestas que tuvieron lugar frente al Congreso los días 25, 26 y 29 de septiembre se saldaran con 40 detenidos y más de 60 heridos, seguirán mostrando su malestar frente a la Cámara.