Vitoria. El aspirante a lehendakari por el PNV, Iñigo Urkullu, ha puesto de manifiesto desde el inicio de la precampaña que su principal reto si logra el plácet de la ciudadanía vasca para tomar las riendas de Euskadi es combatir la crisis. Y una de la principales bazas para hacerlo, a tenor del presidente del EBB, es fomentar la creación de puestos de trabajo, sobre todo en sectores de la población donde el paro se está cebando especialmente como sucede con la juventud.
En la lista de prioridades de Urkullu si alcanza la Lehendakaritza figura la creación de un plan de empleo juvenil cuyo objetivo es permitir que 20.000 jóvenes vascos puedan acceder a su primer empleo. Los primeros brochazos para conseguirlo, que se concretarán en el programa electoral de los jeltzales, dibujan un escenario donde la formación nacionalista asegura que activará los contratos en prácticas y los contratos de formación junto a las fórmulas de autoempleo, las becas de internacionalización y dinamizar Lanbide.
Así lo expuso ayer el líder del PNV en un acto celebrado en la sede gasteiztarra del Araba Buru Batzar que sirvió para presentar a los candidatos que este partido presentará a las urnas por los tres territorios históricos. No será la única pero sí la primera vez en la que la formación jeltzale pone bajo el foco a los 74 dirigentes que acompañarán a Urkullu en la misión de recuperar la gestión de la administración vasca tras tres años y medio en su insólito papel opositor.
En una breve intervención, el líder del EBB estuvo secundado en el improvisado escenario por los cabezas de lista de Álava, Xabier Agirre; Gipuzkoa, Joseba Egibar, quienes junto a la aspirante a presidir el Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria, y el presidente del BBB -y uno de los nombres que suenan con más fuerza para suceder a Urkullu al frente del partido si sale elegido lehendakari-, Andoni Ortuzar, encabezaron la comitiva electoral.